Una nueva avispa “made in” Jaén

El Grupo de Espeleología de Villacarrillo (GEV) está, otra vez, de enhorabuena. Y ya va más de una treintena. Así es desde que, el pasado mes de abril, descubriera una avispa que, hasta el momento, no pertenecía a ninguna familia conocida por los expertos. Ahora, esta especie es la “Dinotrema cavernícola”.

07 ene 2015 / 12:10 H.


La razón de que se le haya dado este nombre, tal y como explica el presidente del colectivo, es que se ha encontrado en las profundidades de la tierra de la provincia, en concreto en el sistema de la Murcielaguina y en la sima de la Colada, ambos en el término municipal de Hornos de Segura, dentro del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas. “La avispa que hemos descubierto salió en uno de los muchos trampeos que hacemos en cuevas de la provincia. Pusimos dos trampas, conocidas como ‘pitfall’, que atrapan los invertebrados para que, después, se puedan estudiar, y cayeron cuatro ejemplares de este invertebrado que, hasta el momento, era desconocido”, apunta el presidente del GEV, quien resalta que es la primera especie del género “Dinotrema” capturada y descrita en la fauna europea a grandes profundidades, más de cincuenta metros.
confirmación. Todo un descubrimiento que siguió el proceso habitual para conocer de qué se trataba este novedoso invertebrado. Así, tras la captura, los integrantes del GEV buscaron científicos capaces de analizar esta familia de avispas. Un trabajo laborioso que dio sus frutos cuando Toni Pérez encontró al doctor Francisco Javier Peris-Felipo, español que trabaja en Suiza y que fue el encargado de confirmar que se trataba de una nueva especie de avispa. Tras la confirmación, el estudio de Peris-Felipo, en el que colaboraron dos doctores más, se publicó en la prestigiosa revista científica “Journal of Hymenoptera Research”.
De este modo, la avispa “cavernícola” se suma a los más de treinta descubrimientos, confirmados científicamente, que el Grupo de Espeleología ya tiene a sus espaldas y a los que hay que añadir varias decenas de hallazgos de especies biológicas que habitan en cuevas que no tienen, por el momento, un trabajo de carácter científico publicado que así lo corrobore.