Una mujer denuncia una violación en el aseo de la Estación de Autobuses

Una vecina de la capital, de unos 35 años, denuncia que fue violada por dos hombres en los aseos públicos de la Estación de Autobuses de Jaén. Relata que los asaltantes accedieron al baño mientras ella hacía sus necesidades y se alternaron para agredirla sexualmente en repetidas ocasiones.
La historia es espeluznante. Ocurrió a primera hora de la mañana del pasado 20 de febrero. Sin embargo, la víctima, que está separada y tiene niños pequeños, no pudo acudir a denunciar hasta hace tan solo unos días. Fuentes judiciales cercanas al caso explican que estaba “en estado de shock, paralizada por lo que le había ocurrido”. Como todos las mañanas, la mujer acudió a la Estación de Autobuses para viajar a Martos, donde tiene su puesto de trabajo.
El día de los hechos tuvo que pasar por el aseo, cuya puerta no tenía cerrojo. Estaba sentada en la taza del inodoro cuando, según su versión, entraron dos hombres de raza negra y muy corpulentos. Uno de ellos la cogió de los brazos y le tapó la boca para que no gritara, mientras que el otro le quitaba la ropa y procedía a violarla hasta eyacular. Después, los dos hombres se intercambiaron. Ella, según contó, quedó “paralizada por el miedo”. La agresión duró entre quince y veinte minutos, según relató la víctima, que apenas pudo aportar nada más: “Estuvo totalmente bloqueada. Fue incapaz de hacer nada, ni siquiera moverse, gritar o pedir ayuda cuando sus agresores se marcharon”, explican las fuentes consultadas.
“Como una autómata” fue a trabajar. Su compañera la notó muy extraña, pero no le dio más importancia. Al día siguiente, la mujer seguía “como en otro mundo”. Finalmente, se derrumbó y contó lo que le había ocurrido en el aseo de la estación. “Estaba fatal. Ese mismo día tuvo que ir al centro de salud”, insisten personas que han estado con ella en las últimas horas.
El médico emitió un parte de lesiones en el que se relataba todo lo que había ocurrido en el que describe a un mujer con el cuadro típico de la víctima de una agresión sexual. Tuvo que someterse a diversas pruebas para descartar que estuviera embarazada o que se hubiera contagiado de alguna enfermedad de transmisión sexual, como el sida. También, tiene una tratamiento psicológico que le ayuda a afrontar este difícil trance.
El protocolo para estos casos ordena que el parte de lesiones se envíe al Decanato de Jaén, que debe determinar a qué Juzgado de Instrucción le corresponde la investigación de los hechos.  Por lo tanto, por el momento, no hay diligencias abiertas y no se ha ordenado a la Policía Nacional tratar de averiguar qué sucedió en la mañana del 20 de febrero en la Estación de Autobuses. Oficialmente, el caso de esta supuesta violación todavía no existe a ojos de la Justicia, ya que la denuncia está aún en trámite.
Una vez que se abra la investigación, el primer paso será revisar las cámaras de seguridad que existen en la Estación de Autobuses para comprobar la veracidad de la historia y poner cara a los presuntos autores: “No creo que la mujer se haya inventado esta historia. ¿Qué ganaría?, se pregunta un policía con años de experiencia.

08 mar 2014 / 10:35 H.