Una histórica judería que agoniza

En pleno corazón de la judería y con el afán de que la zona sea lo más habitable posible, el representante de “Arco del Consuelo”, Antonio Lozano, repasa las principales deficiencias del barrio. Solares abandonados y sucios, casas en peligro de derrumbe o pavimentos imposibles están en el punto de mira.
La luz de los solares que se abren en las calles de la judería jiennense se torna en oscura para convertirla en una zona umbría. Lo que años atrás se conformó como el centro más “chic” de la capital, ahora intenta sobrevivir a la dejadez de sus políticos y a la falta de respeto de algunos de sus residentes. Por eso, uno de los “veladores” del casco antiguo y presidente de la Federación Más Voluntades, Antonio Lozano, denuncia el lamentable estado de abandono en el que se encuentra la zona.

24 mar 2014 / 23:00 H.

“Se habló de la creación de huertos urbanos en la zona. Eso está bien, pero antes que nada habría que apostar por una ciudad habitable”, critica Lozano. Desde la Plaza de los Huérfanos, la ruta por las estrechas y recoletas calles se prevé atractiva e ilusionante. Sin embargo, a medida que se adentra en sus entrañas, Lozano señala con decisión, las taras de un barrio deslucido. “Mira, otro solar abandonado. Esto es una vergüenza”, dice, el presidente de Arco del Consuelo, mientras se detiene ante un terreno dejado a su suerte, en la calle Santa Cruz. Para Antonio Lozano la solución es sencilla: “Si el propietario no puede edificar, que lo rehabilite acorde al entorno, y si no lo hace, que lo expropie el Ayuntamiento”, manifiesta.
Durante el recorrido por las históricas calles, otro de los solares que se abren con gran espectacularidad es el de la construcción del futuro Instituto de Enseñanza Secundaria. “Siempre hemos defendido la construcción del centro, pero la idea inicial era la ampliación del San Juan Bosco porque querían llevarlo al Bulevar”, recuerda Lozano, después de hacer hincapié en el mal estado de la Plaza de los Baños del Naranjo.
La estrechez de las casas no solo embellece la judería, sino que provoca una sensación abrumadora a quien pasea. No obstante, esta antigua disposición urbanística, se transforma en una amenaza por la dejadez de las fachadas de algunas casas. “Esta construcción sufre el riesgo de que la tapia que se levantó para cubrir el solar de enfrente se derrumbe y le afecte”, explica Lozano con un argumento previsor. “Hay edificios que tenemos denunciados al Ayuntamiento y a los que les hacemos el seguimiento. Por ejemplo, esta casa la tienen tapiada”, dice Antonio Lozano mientras señala la fachada de un edificio cercano al Hospital San Juan de Dios. Mientras, en la calle, Hospital de San Miguel se aprecia un solar, propiedad de la Junta de Andalucía. “Es intolerable que se deje en este estado. Y se trata de una Institución pública”, lamenta el representante vecinal.
registrado. La defensa por la rehabilitación y adecuación del casco antiguo para que sea uno de los atractivos de la capital, es una acción continua por parte de Lozano, quien apunta que desde el año 1993, cuentan con informes de viviendas de la zona. En los alrededores del antiguo Hospital San Juan de Dios, la pavimentación de las calles invita al visitante a transitar con cautela. Y es que, otro de los déficits que critica el presidente de “Arco del Consuelo” es la falta de cuidado y de mantenimiento. “¿Y queremos que Jaén sea una ciudad turística?”, pregunta retóricamente Antonio Lozano.