Un respaldo clave para la necesaria integración de cooperativas

Ya es oficial sobre el papel, el paso que faltaba. El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía acaba de publicar la orden de ayudas para financiar la integración de almazaras y cooperativas oleícolas en grandes grupos de comercialización. Las nuevas medidas que anunciara la Administración autonómica hace semanas se materializan de esta forma, de manera que quienes apuesten por la unidad pueden llegar a recibir hasta 400.000 euros de ayudas. El objetivo, repetido hasta la saciedad, es luchar contra la impresionante atomización del sector olivarero, con alrededor de trescientas almazaras dispersas en sus pueblos y ciudades. Interóleo Picual no ha tardado en mostrar su satisfacción, como no podía ser de otra manera, porque así se abren las puertas para que más cooperativas se animen a tomar parte en esta iniciativa de futuro. Sólo concentrando fuerzas y esfuerzos se puede ganar peso en un mercado como el del aceite, algo fundamental en una encrucijada tan complicada como la actual. La oportunidad para concentrarse es la más oportuna, además de tremendamente necesaria, y hay que dejar claro que las subvenciones no van a ser eternas en el tiempo. Algún día llorar y llorar clamando fondos públicos no será la solución.
Y, precisamente ayer, en el Congreso, como continuidad a lo que ya se dio a conocer el pasado lunes, se adelantó que la semana próxima “con toda probabilidad”, se activará por fin el almacenamiento privado par que este mecanismo pueda comenzar a funcionar en el próximo mes de julio. Esos son los plazos marcados desde el Comité de Gestión de la Unión Europea, con lo que se espera que se reactive el precio en origen. No es la panacea, como es sabido, y como precisó el propio diputado socialista Francisco Reyes. Quizá sea pan para hoy y hambre para mañana, pero en coyunturas económicas como la actual, todo lo que sea sumar, siempre es positivo.