Un parque de ocio al natural en La Iruela

A la pregunta sobre el emplazamiento del futuro parque de ocio  y de la naturaleza que se pretende abrir en Cazorla, Segura y Las Villas surge una nueva respuesta. Si en septiembre SantiagoPontones despertaba, según su Gobierno local, un “gran interés” de los promotores (JAEN, 23/9/2009), dos meses más tarde, todas las “papeletas” para beneficiarse de esta inversión las tiene La Iruela. Como pasó entonces, Naturpark, la firma que está detrás de esta iniciativa, apadrinada por la Junta, guarda silencio. Es el alcalde del pueblo posible receptor, en este caso, el irolense José Antonio Olivares, el que desvela la marcha de las negociaciones. El regidor aclara que la sociedad inversora presentó un borrador de lo que pretende poner en marcha, algo que, como dice, “es importante” para La Iruela. Este hecho significa, para el máximo responsable municipal, que otras opciones barajadas por la sociedad Naturpark, como Santo Tomé o Santiago Pontones, quedan descartadas. La razón de peso que, según el alcalde, inclina la balanza a favor de La Iruela es su potencial hotelero: 2.643 plazas en una población de 1.985 habitantes. Este optimismo municipal no significa que las obras vayan a comenzar mañana; el mismo alcalde aclara que ahora comienza, en sus palabras, “un largo camino”.

Este periódico tuvo acceso a documentos que demuestran el interés de Naturpark por La Iruela. El más esclarecedor tiene registro de entrada en la Administración local irolense el pasado 26 de octubre de 2009. Se trata de un escrito de “declaración y manifestaciones sobre la adquisición del terreno para el proyecto” en el que el administrador único de la sociedad deja constancia de que tiene apalabrada la compra de varias fincas en La Iruela. Esta instancia se presentó como complemento a la solicitud de pronunciamiento que, diez días antes, hizo la firma a la Corporación para que dejara constancia de su interés por acoger el complejo turístico. Como expresión de esta voluntad, le pidieron al Ayuntamiento la exención de tasas, respaldo político y la declaración de utilidad social del suelo.