Un motorista pierde las piernas en un guardarraíl

Un motorista villanovense, de 24 años, sufrió ayer terribles heridas al estrellarse el vehículo que conducía en la N-322. El accidente ocurrió, según el 112, a las dos y media de la tarde del domingo, a la altura del kilómetro 195, en Gútar. El Servicio de Emergencia explica que el joven impactó contra la valla protectora de la calzada, por lo que sufrió terribles lesiones en sus extremidades. Como se explicó a este periódico, las dos piernas están amputadas.  Después de ser rescatado y atendido por el 061 en el mismo lugar, se decidió su traslado al Hospital Neurotramatológico de la capital granadina.  La noticia ha causado un gran impacto en el municipio del joven, Villanueva del Arzobispo, a escasa distancia del lugar del accidente. El lugar en el que la moto perdió el control es una zona de curvas, definida como “peligrosa” por muchos conductores y donde, ya la semana pasada, hubo, un accidente, aunque leve. Al parecer, según vecinos, el motorista accidentado se dirigía, junto con otros amantes de estos vehículos, a una concentración.
Vigilancia. Por otro lado, a las ocho y media de la tarde del domingo, la Guardia Civil sorprendió a un conductor que iba ebrio al volante. La Benemérita le imputa un delito contra la seguridad vial. En las pruebas de alcoholemia, el acusado, J. C. A., arrojó un resultado de 1,05 y 0,97 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. El Instituto Armado le dio el alto en la A-315, a la altura del término de Torreperogil. Los desplazamientos por las carreteras de la provincia se incrementan durante estas jornadas, vacacionales para muchas personas, por lo que las medidas de prevención aumentan.