Un mapa de Jaén de 226 años
La vida está llena de casualidades, algunas tan certeras que parecen provocadas. Es el caso vivido por Luis Ramírez, un joven historiador e investigador que, por azar del destino, tiene en sus manos el grabado original del mapa del Reino de Jaén, un documento datado de 1788, con 226 años de historia. La curiosidad del caso es que este coleccionista es valenciano, pero sus raíces proceden de Bailén. Pero es que, además, el archivo se lo regalaron, precisamente, por su vinculación con las tierras olivareras. “Más allá del valor histórico o monetario que pueda tener, para mí posee un gran valor sentimental. En apenas dos horas detecté la importancia del mapa”, relata Ramírez desde la lejanía.
La vida está llena de casualidades, algunas tan certeras que parecen provocadas. Es el caso vivido por Luis Ramírez, un joven historiador e investigador que, por azar del destino, tiene en sus manos el grabado original del mapa del Reino de Jaén, un documento datado de 1788, con 226 años de historia. La curiosidad del caso es que este coleccionista es valenciano, pero sus raíces proceden de Bailén. Pero es que, además, el archivo se lo regalaron, precisamente, por su vinculación con las tierras olivareras. “Más allá del valor histórico o monetario que pueda tener, para mí posee un gran valor sentimental. En apenas dos horas detecté la importancia del mapa”, relata Ramírez desde la lejanía.

El joven es propietario de la Colección Espínola. Recibió, como obsequio, el grabado, perteneciente a la obra del ilustrador Bernardo Espinalt y García, quien ocupaba el cargo de Administrador General de los Correos del Reino de Valencia y miembro de la RealSociedad Económica Matritense de los Amigos del País. Esta estampa también se puede localizar en el Archivo de la Junta, que conserva varios grabados del mapa del Reino de Jaén, “pero con cambios sustanciales” al descubierto, ahora, en Valencia.Es por eso que, para que se pueda apreciar el hallazgo, el coleccionistas se ofrece a cederlo a la Diputación o a la Administración pertinente, para exponerlo.
Según los estudios de Luis Ramírez y comparándolo con el que se custodia en Sevilla, en el documento se aprecian trazos de lápiz. El escudo como la corona del Reino de Jaén están medio trazados. Además, la cartela tiene un grosor fino muy alejado de la última versión. Finalmente, el investigador explica que este mapa inicial de Palomino se escribe las palabras “ryo” con y griega, mientras que, posteriormente, todos aparecerán con i latina y en cambio “Reino” lo escribe con i latina y posteriormente aparecerán con y griega, así como la indicación del “Reino de Murcia” aparece escrito a la inversa de acabado.
Este documento histórico, con una medida de 18 centímetros de largo por 14 de alto, es “muy interesante”, según Luis Ramírez. “Es una prueba de autor para el desarrollo del diseño del Mapa del Reino de Jaén. Es muy difícil o casi imposible localizar estos documentos de estudios, ya que muchos de ellos se destruían después de haberse terminado de crear”, asegura. Ramírez deduce que, posiblemente, el mismo grabador entregó a Bernardo Espinalt en Valencia el diseño y, después de más de dos siglos de pasar de mano en mano, se ha descubierto el sentido de este “ilustrado documento”.