Un lugar de recreo para el pantano
De momento, no hay demasiada sombra, pero, en un futuro, los seiscientos árboles plantados en un terreno de unos veinte mil metros cuadrados —cedido por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir al Ayuntamiento por un periodo de diez años prorrogables— permitirán disfrutar aún más del nuevo lugar de recreo con el que cuenta el embalse del Víboras, al que se puede acceder por un carril que hay entre La Carrasca y Las Casillas.
El alcalde, Francisco Delgado; el concejal de Desarrollo, Manuel Consuegra; el edil de Medio Ambiente, Juan Erena, y miembros del Gobierno local, entre otros, inauguraron esta área de ocio, en la que, según comentó Consuegra, se trabajó durante más de un año para su puesta en valor y para poder disfrutar de una jornada en familia o entre amigos en un paraje incomparable. De hecho, precisó que, junto con las plantaciones, se instalaron dieciséis mesas de madera con sus bancos (los merenderos) y entre doce y catorce barbacoas.
El edil consideró que puede ser el comienzo para potenciar el turismo en la pedanía y animó a empresas del sector a que pongan su mirada en este entorno. Subrayó que, en este proyecto, se invirtieron desde el Ayuntamiento alrededor de 77.000 euros.
Por su parte, el alcalde valoró el “enclave privilegiado” de esta nueva área recreativa. “Las Casillas necesitaba un aliciente para darle un mayor atractivo a esta zona rural”, expresó, a la vez que consideró que, si se apuesta por los núcleos rurales, se conseguirá que las viviendas no se queden vacías y que los vecinos no tengan que irse a las ciudades. Lo que queda pendiente del proyecto, y el próximo objetivo del equipo de Gobierno es que el embalse del Víboras “se abra” a la navegación de barcas sin motor. “Es algo de futuro, iremos pasito a pasito”, apuntó Delgado.Finalmente, reconoció que el pantano tiene un problema, que es cuando sube el nivel del agua. Se espera poder encontrar una solución lo antes posible.