Un festival de primera división
Continente y contenido de auténtico lujo. La bella ciudad renacentista de Úbeda, Patrimonio de la Humanidad, estrena hoy una nueva edición de su ya consolidado y prestigioso festival Internacional de Música y Danza, una cita de primer nivel. Una fecunda trayectoria de calidad avala la celebración de una esperada cita, por la que han pasado grandes artistas y orquestas no solo del país, sino del panorama mundial. A lo largo de un mes, hasta el 13 de junio, el rico legado del genial Andrés de Vandelvira se verá envuelto de una atractiva programación cultural con una veintena de actuaciones previstas, en el marco de la conmemoración del quinto centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús. Y, hoy, con los nombres de José Mercé y José Manuel Zapata para abrir boca. Curiosa paradoja que sea un maestro del flamenco, declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, el que sirva para inaugurar el festival en la ciudad también distinguida por la Unesco. Veintisiete ediciones ya, que desde el primer día saca adelante la Asociación Amigos de la Música de Úbeda, el ejemplo nítido de que cuando la sociedad se implica los proyectos se fortalecen con el tiempo. El colectivo ha sido capaz de aupar hasta un lugar de privilegio el festival, a fuerza de tesón y pasión por los acordes en todas sus múltiples variedades. Y siempre con la máxima de que todo el dinero que se dedica a la cultura no es un gasto, sino una inversión.
Úbeda ha sabido labrarse un nombre en el panorama cultural más allá de nuestras fronteras a lo largo de casi tres décadas con la organización del festival más prestigioso del país, solo después del de Granada, un marchamo artístico singular que enriquece aún más la ciudad patrimonial.
Úbeda ha sabido labrarse un nombre en el panorama cultural más allá de nuestras fronteras a lo largo de casi tres décadas con la organización del festival más prestigioso del país, solo después del de Granada, un marchamo artístico singular que enriquece aún más la ciudad patrimonial.