Un desfase escandaloso

Mi gran noche.

De una "gran noche" cabe esperar grandes emociones. Vivencias memorables de esas que se paladean, una y otra vez, en el pensamiento con el mismo placer con el que la lengua se recrea en un bombón de chocolate suizo con corazón fundente. Una gran noche, "sin rumbo", como vaticina Raphael en su archiconocida canción, abre la puerta a "misterios". A sensaciones inéditas. A una experiencia singular y genuina. Pero la última película del irreverente Álex de la Iglesia no provoca nada de eso.

Su parodia de los "cotillones" que programan las cadenas de televisión para celebrar los fines de año es un desfase inteligente en la idea, pero atropellado y escandalosamente cargante en su desarrollo. Y eso es lo que queda. Mi gran noche satura. Contamina, como el exceso de publicidad en la Quinta Avenida de Nueva York o en el Gagnam District de Seúl. Es como una imagen con los colores primarios descompensados. Un desajuste que fatiga a la vista. Un exceso en el que la crítica a los medios de comunicación que ya centraba La chispa de la vida (2011) queda difuminada en una locura que acaba en mediocridad.

Están fuera de toda duda la audacia de De la Iglesia, su habilidad en la dirección —notoria en el rodaje de persecuciones y espectáculos de baile—, y el talento de un elenco que transmite el buen rollo de la filmación y en el que brillan la capacidad de Mario Casas y la del propio Raphael para reírse de sí mismos. Aparte, son irreprochables la calidad técnica de la película, con un maquillaje y un vestuario absolutamente sobresalientes, y una banda sonora basada fundamentalmente en los grandes éxitos del "niño de Linares". Pero, ¿todo eso para qué? ¿Dónde está el desvergonzado cineasta de la brillante El día de la Bestia (1995) o de la magnífica Balada triste de trompeta (2010)? ¿Se puede permitir un crack ganar únicamente en las categorías técnicas, aunque sea una victoria? ¿Se lo merecen los seguidores de su cine y la "industria" cinematográfica española, si es que puede llamarse así?

 

España. 2015. Dirección: Álex de la Iglesia. Intérpretes: Raphael, Mario Casas, Pepón Nieto, Blanca Suárez, Carlos Areces, Luis Callejo, Carmen Machi, Jaime Ordóñez, Santiago Segura, Hugo Silva, Carolina Bang. Producción: Enrique Cerezo P.C. / Telefónica Studios / TVE / Canal Plus. Guión: Álex de la Iglesia, Jorge Guerricaechevarría. Fotografía: Ángel Amorós. Música: Joan Valent. Género: Comedia

 

11 nov 2015 / 15:53 H.