Un cambio de actitud

Concepción Agustino Rueda desde Jaén. El nuevo lema de Cáritas: 'Vive sencillamente para que otros, sencillamente, puedan vivir', es una llamada imperiosa a la austeridad y la solidaridad. Como sabemos, son muchas las personas necesitadas de nuestra ayuda, que debe partir de la reflexión y del cambio de actitud en nuestro modo de vivir.

    14 jun 2012 / 11:43 H.

     No podremos transformar el mundo en solitario, ni alterar las estructuras que sustentan nuestra sociedad, pero sí podemos y debemos aportar nuestro grano de arena para que la justicia, la equidad, sean valores en alza, y no metas inalcanzables, ni meras utopías. Ésto, que es más que sabido, no es por ello algo dado por hecho, ni un objetivo ante el que sentirnos impotentes. Está en nuestras manos, en las manos de todos aquellos que podemos compartir nuestros bienes, que este mundo nuestro sea un mundo más habitable, donde la pobreza y el desamparo que sufren tantas familias, sean paliados por nuestra generosidad. Jesús de Nazaret nos dice que “ni un solo vaso de agua fresca que demos, quedará sin recompensa”. Estas palabras han de constituir un consuelo y un estímulo para todos nosotros. “Vivir sencillamente” en estos momentos difíciles y duros, no debe ser considerado una proeza, ni algo de lo que sentirnos, especialmente, orgullosos; es un acto de estricta justicia y de sensatez, “para que otros, sencillamente, puedan vivir”.