Un alcalaíno es detenido por estafar en la venta de coches
Un presunto reincidente. La Guardia Civil detuvo a un vecino de Alcalá la Real, Francisco I. M., como supuesto autor de estafas perpetradas en la venta de coches. Este ciudadano es uno de los principales implicados en la operación Laguna, que en el otoño de 2006 destapó una trama de fraude en la comercialización de automóviles, con arrestos en diferentes provincias.
Según explica la Guardia Civil a través de una nota de prensa se considera al arrestado, de cuarenta y un año, responsable de dos delitos de estafa en la compra-venta de otros tantos vehículos, uno en el municipio sevillano de Dos Hermanas y otro en Huércal de Almería. El Instituto Armado explica que las indagaciones las comenzó el área de Investigación del cuerpo en Alcalá la Real, cuando los agentes recibieron la denuncia de un residente que se consideraba engañado en la adquisición de un automóvil, ya que no podía realizar la transferencia al constarle en la Dirección General de Tráfico una reserva de dominio.
El comunicado añade que, a raíz de las indagaciones, se conocieron dos casos similares en las provincias de Almería y Sevilla. La Benemérita explica que el hombre tiene un amplio historial delictivo por estafas y grandes conocimientos en el mercado del automóvil. De hecho, el “modus operandi” es prácticamente idéntico al descubierto en la operación Laguna, aunque sin el uso de la Red, con la perpetración de dos fraudes con un mismo turismo.
De acuerdo con lo que expone la Guardia Civil, el hombre se anunciaba a través de internet y se ofrecía a gestionar el pago a través de financieras. En este sentido, entre los documentos que firmaban los clientes había una autorización para que el presunto delincuente retirara el auto del concesionario. Luego volvía a vender el producto a un tercero, como ocurrió con el vecino de Alcalá que presentó la denuncia.
lucro. El negocio, como ocurría en la operación Laguna, era redondo, pues, presuntamente, Francisco I. M. se beneficiaba, por un lado, con la primera venta. Los clientes, al verse entre la espada y la pared, seguían con los pagos ante el riesgo de un embargo. Por otra parte, lo hacía al “colocar” el mismo coche a otra persona, que en teoría sí podía disfrutar del vehículo, aunque en la práctica tenía problemas burocráticos.
En principio, la Guardia Civil no ha especificado si hay más sospechosos, aunque en “Laguna” existía una trama con presuntos implicados en Alcaudete y de los municipios granadinos de Pinos Puente, Pulianas y Albolote, y diversos cómplices en una estructura delictiva que se extendía por territorios de Córdoba, Granada, Sevilla, Murcia y Jaén. Como consecuencia de esa operación, que llegó a tener dos fases, una en otoño de 2006 y otra en marzo de 2007, Francisco I. M., una persona muy conocida en Alcalá la Real, llegó a pasar un tiempo en prisión preventiva, hasta que las autoridades decidieron dejarlo libre.
En esta ocasión, el imputado por los hechos, que comenzaron a investigarse en el primer tramo del presente verano, quedó en libertad con cargos, después de declarar. Ahora está por determinar en qué niveles se sustanciará la instrucción del caso. Es posible que, además del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Alcalá la Real, cuya titular es Cristina Luis, diligencias relacionadas con el caso se realicen en las provincias de Sevilla o Almería.
El Instituto Armado no ha hecho pública la cantidad exacta en la que se cifra el importe estafado y si se conocen más automóviles comercializados de modo irregular. El empleo de anuncios a través de la Red facilita el contacto con personas repartidas por todo el territorio nacional, que buscan gangas en tiempos de crisis.