Toldos de San Clemente

José Andrés López/Desde Jaén. No se retiraron como tenía que ser al final del verano pasado, y llegó la improvisación, y deprisa y corriendo tuvieron que quitarse algunos por parte de los bomberos ante las ventoleras que tarde o temprano llegarían a la ciudad y ponían en peligro el trasiego de los ciudadanos por una de las calles más comerciales de la capital, como es la calle San Clemente.

    15 may 2012 / 11:16 H.

    Han pasado los días, vuelve el calor, y los toldos siguen como los dejaron las ventoleras, es decir, medios descolgados, sueltos por los extremos, medios enrollados, sin instalar de nuevo los que quitaron, etcétera. Llegarán junio, julio, agosto, etcétera, y todo seguirá con el mismo aspecto de abandono hasta que vuelva por llegar el mal tiempo y los destroce por completo. Aquí extraña mucho la apatía de los comerciantes que son los más beneficiados y perjudicados a la vez. Pasará igual que con las fuentes de la Plaza Santa María, las iluminarías, etcétera, se han estropeado por abandono y así se quedarán para el resto de sus días. Las escaleras mecánicas que estaban muy bien sobre todo para la gente mayor, pues nada, se han parado y así se quedarán para el resto. Está visto que la ciudad no puede progresar, por narices tenemos que ser la última en todo y para todo. Pregunto: ¿Hasta qué punto va a llegar el estado de abandono de la ciudad? ¿A qué se dedican?