TERESA MARÍN MORAL. "El 13, el17 y el 19 son los números más demandados"

Juana Pastor Rama
Ni tiene en sus labios un cante, ni en la mano un quince mil (que eso queda en la historia trágica de una copla); pero sí cuenta con series muy bonitas que muy bien pudieran dar una gran alegría a quienes le compren la suerte. No sale mañana, pero sí estamos a las puertas de que nos pueda visitar “el Gordo”.

    25 nov 2012 / 10:42 H.

    —¿Desde cuándo está al frente de esta administración de lotería?
    —La concesión se la dieron a mi madre en el año 1959. Después de 30 años, pasé a ser yo la titular, por lo que desde el principio estuve respirando el ambiente lotero. Desde el comienzo tuvimos empleadas. La primera fue Etelvira Quintero y, tras su jubilación, entró a formar parte de la familia María del Carmen Moreno, que lleva 20 años conmigo. Ella es un pilar importante en mi empresa, puesto que el trabajo es compartido. Es una persona muy abierta y amable con el público, algo que se refleja en el número de clientes. También es constante en su trabajo y me facilita mucho toda la labor de ventas.
    —¿La administración de Navas de Tolosa es una de las más antiguas de Jaén?
    —Una de las dos primeras; como dije anteriormente, desde finales de los 50 estamos abiertos al público y nuestra constante ha sido siempre prestar un buen servicio a todos nuestros clientes.
    —Contarán con anécdotas curiosas a lo largo de tantos años. ¿Recuerda alguna?
    —A comienzos de los ochenta sirvieron el mismo número a dos administraciones, una fue la nuestra. Fue el día de San Valentín —Día de los Enamorados—, y tuvimos la buena suerte de dar el premio mayor. Recayó en el número 18009. Este tipo de anécdotas siempre es agradable recordarlas. A lo largo de tantos años hemos dado algunos premios más que en su día fueron noticia y que seguro figuraran en los archivos del diario.
    —¿Ha restado en ventas el sorteo de la Lotería Nacional por las múltiples opciones de otros juegos, tales como la Primitiva, el Euromillón y la Bonoloto?
    —Por supuesto que sí. El presupuesto de cada jugador se ha visto repartido probando suerte en otros sorteos. Son muchas las opciones de juego hoy día y, al ser más económica la apuesta, arriesgan buscando premios más importantes. No obstante, nuestra venta sigue a buen ritmo.
    —¿Cuenta con buena clientela?
    —Sí, tanto en cantidad como en calidad tenemos unos clientes extraordinarios que ya son conocidos de muchos años y que pasan de generación en generación. Les agradecemos su fidelidad a través de nuestro empeño en que el cliente quede satisfecho en todo cuanto nos solicita.
    —¿Juega a su favor en ventas la ubicación de su administración?
    —Presumo de estar en un punto donde la venta tiene muy buena respuesta. Es una calle comercial importante y justo al lado de la estación de autobuses; hay una gran afluencia de viajeros y esto nos facilita mucho las ventas.
    —¿Es el Sorteo de Navidad en el que más  juegan los participantes?
    —Sin lugar a dudas, es uno de los sorteos más importantes, junto con el del Niño. Es de gran tradición y cuenta con mucho arraigo en nuestra sociedad. De hecho, en este sorteo juega gente que no lo hace a lo largo del año.
    —¿Desde cuándo empieza a venderse la Lotería de Navidad?
    —Su venta se prolonga a lo largo de varios meses. Es la venta más larga del año, ya que las administraciones reciben los números las primeras semanas de julio. Por ello, es en el sorteo que más se juega y el más popular. Como curiosidad, me gustaría destacar que la primera vez que se llamó “Sorteo de Navidad” fue el 23 de diciembre de 1892, aunque no figuró impresa en los billetes hasta la Navidad de 1897. La Lotería de Navidad repartirá este año 2.520 millones en premios y es el último año que se van a cobrar libres de impuestos. Así que: ¡Que nos toque ahora, digo yo!
    —La terminación más solicitada por sus clientes, ¿cuál suele ser?
    —Sin duda alguna en nuestra administración son los números 13, 17 y 19, entre otros. Son números fijos y suscritos que tenemos y vendemos a lo largo de todo el año en los distintos sorteos de jueves y sábado. Algunos de ellos, incluso, ya están agotados.
    —¿Facilitan las nuevas tecnologías el trabajo en las administraciones?
    —La Lotería Nacional también se comercializa a través de los terminales electrónicos situados en todos los establecimientos de la red de ventas de Loterías y Apuestas del Estado. También se pueden seleccionar los dígitos de forma automática, aunque en este caso el número seleccionado estará sujeto a disponibilidad del mismo, ya que muy bien puede estar asignado a cualquier administración y en ese caso, si tuviéramos un especial interés en un determinado número, sería cuestión de localizarlo a través de internet.
    —¿Aumenta la venta en una administración si esta da un premio importante?
    —Por supuesto que una vez se conoce el punto de venta donde ha sido agraciado el número, la gente visita el establecimiento esperando que se repita la suerte. Tenemos de ejemplo otras administraciones de la geografía española que se han hecho famosas y que les demandan un porcentaje alto de décimos tras haber repartido un premio.
    —¿Venden todos sus números en ventanilla o sirven a otros lugares?
    —Recibimos muchas peticiones de otras provincias como Madrid, Barcelona, Zaragoza y Oviedo, que buscan un número que está asignado a nuestra administración. La mayor parte de la venta se expende en ventanilla —esto solo en los sorteos ordinarios—. En Navidad sí se venden el número o series completas a cofradías, tales como  “La Estrella”, “La Borriquilla”, “La Buena Muerte”, San Juan y asociaciones benéficas, como la de apoyo al Síndrome de Down, Cáncer, etcétera. También lo vendemos a empresas, restaurantes, a los bomberos, a la papelera de Mengíbar y muchos más. Contamos con un número importante de suscripciones, esta es la base del sostenimiento de nuestra empresa, ello nos ayuda a seguir adelante. A todos les deseamos la mayor suerte del mundo.
    —¿Se atrevería a pronosticar la terminación del Gordo para este año?
    —¡Sí! El número que usted se ha llevado.
    —¿Ha influído la crisis económica también en la venta de décimos, o seguimos apostando por si nos acompaña la diosa Fortuna?
    —Sí que influye. La persona que años anteriores jugaba más décimos, hoy ha reducido en un porcentaje importante su compra. No obstante, sí que se sigue apostando e intentando conseguir algún pellizco de uno de los “gordos” para seguir invirtiendo en el próximo Sorteo del Niño.
    —¿Le rechazan algún número?
    —Sí, sobre todo los números bajos; aunque ha habido casos de devoluciones que luego este ha sido agraciado con el Gordo, pues hay que tener en cuenta que todos los números entran en el bombo.