Superación para salvar las barreras
Eran las siete o las ocho de la mañana cuando llegó a este mundo. Solo había pasado 26 semanas en el vientre de su madre. Felipe Hoyo García tenía mucha prisa por nacer y su nacimiento prematuro hizo que hasta los médicos lo diesen por muerto. “Lo dejaron en la sala de partos esperando el deceso”, recuerda su madre, María, pero el bebé tenía tantas ganas de vivir que, varias horas después, lo trasladaron de urgencia a Córdoba. Allí pasó varios meses en una incubadora hasta que estuvo completamente formado.
Hoy tiene 23 años y la mayor secuela de los avatares sufridos en sus primeros días de vida es que es sordociego con resto visual, es decir, que con ayuda de unas gafas puede ver. Sus padres, Felipe y María, lejos de tirar la toalla, apostaron por que alcanzase el mayor grado de autonomía. Lo lograron. En la actualidad, es un joven estudiante que vive en Granada de una forma totalmente independiente.
Eran las siete o las ocho de la mañana cuando llegó a este mundo. Solo había pasado 26 semanas en el vientre de su madre. Felipe Hoyo García tenía mucha prisa por nacer y su nacimiento prematuro hizo que hasta los médicos lo diesen por muerto. “Lo dejaron en la sala de partos esperando el deceso”, recuerda su madre, María, pero el bebé tenía tantas ganas de vivir que, varias horas después, lo trasladaron de urgencia a Córdoba. Allí pasó varios meses en una incubadora hasta que estuvo completamente formado.
Hoy tiene 23 años y la mayor secuela de los avatares sufridos en sus primeros días de vida es que es sordociego con resto visual, es decir, que con ayuda de unas gafas puede ver. Sus padres, Felipe y María, lejos de tirar la toalla, apostaron por que alcanzase el mayor grado de autonomía. Lo lograron. En la actualidad, es un joven estudiante que vive en Granada de una forma totalmente independiente.

Hoy se celebra el Día Internacional de las Personas Sordociegas. La ONCEy la Asociación de Sordociegos de España en Andalucía (Asocide) aprovecharán la efeméride para reclamar más visibilidad del colectivo en la sociedad y reivindicar sus derechos como ciudadanos. Para ello, se celebrará mañana un acto en Málaga en el que se leerá el manifiesto.
En España viven 6.000 sordociegos y, según los datos del director provincial de la ONCE, Pascual Gualda, en Jaén hay 6. Esta doble discapacidad genera problemas de comunicación y necesidades especiales. Como consecuencia de la incomunicación y desconexión con el mundo que la privación sensorial genera en las personas sordociegas, estas presentan una serie de dificultades que se manifiestan en diferentes grados en el acceso a la información, la educación, la capacitación profesional, el trabajo, las relaciones sociales y la actividad cultural.
Por este motivo, la principal exigencia de los afectados es conseguir una integración verdadera. Y en esto Felipe Hoyo García es un verdadero ejemplo de fuerza, superación y de no tirar la toalla. Sus padres tuvieron mucho que ver en su trayectoria. De hecho, su madre es consciente de la niñez tan dura que vivió su hijo. “Con tres años, lo levantaba a las siete de la mañana para ir al colegio Cándido Nogales. Llegaba a la hora de comer y, por la tarde, lo llevábamos a una profesora de apoyo para que le enseñase la lengua de signos, logopedia y todo lo necesario.Era mucho trabajo para un niño tan pequeño”, recuerda.
Es un joven responsable y no ha dejado de estudiar. Según explica Felipe Hoyo, terminó la Enseñanza Secundaria Obligatoria en Madrid. Luego se matriculó en un ciclo de Grado Medio de Aceites y Jugos. “Después, preparé la prueba de acceso para entrar en otro de Grado Superior y, aunque aprobé, no obtuve plaza. Entonces decidí apuntarme a un curso de especialista en lengua de signos española”, comenta. Volvió a intentar entrar en el ciclo superior, pero se repitió la misma situación. El joven decidió continuar su formación y, en la actualidad, estudia un ciclo de panadería, repostería y pastelería en Granada.
“Me cuesta mucho estudiar, pero, poco a poco, lo consigo. Además se adaptan los textos. También utilizo resúmenes y tengo siempre un profesional de apoyo para ayudarme en esta tarea”, comenta.
Se define como una persona responsable, simpática y tranquila. Ante la adversidad, afirma que saca las fuerzas para seguir en la esperanza de conseguir un título que le permita labrarse un futuro profesional estable.
Por este motivo, su consejo para todos los que se encuentran en su misma situación es que estudien:“Poco a poco aprenderán cosas básicas que les ayudarán a superarse”.
Felipe Hoyo considera que buena parte de la sociedad está sensibilizada con la discapacidad. “Hay una pequeña parte, como algunos políticos, que no se preocupa tanto por los discapacitados, por su futuro y su inserción laboral”, reseña el joven.
En este punto reside la importancia de celebrar el Día Internacional de las Personas Sordociegas. “La sociedad debe sensibilizarse y conocer cuáles son las necesidades de las personas sordociegas con respecto a muchos ámbitos, como la educación, su vida cotidiana o el empleo”, concluye.