Stop para terminar con la violencia

“En su día ya nos parecieron lamentables las agresiones contra los aficionados del Alavés o los incidentes callejeros con los seguidores del Córdoba. Pero lo que ya pasa de castaño a oscuro fue la pelea entre aficionados del Real Jaén ocurrida hace unos días en el campo del Villargordo y protagonizada por los mismos de siempre. Nos parece lamentable que el club no tome cartas en el asunto y niegue la entrada en el campo a los responsables de estos hechos”, argumentan los aficionados del conjunto blanco. El club abrió un expediente informativo y está previsto que en el transcurso de esta semana se informe sobre su resolución. La junta directiva, que condenó los hechos el mismo día en un nota de prensa, anunció medidas contundentes para erradicar este tipo de situaciones. Los aficionados blancos opinan sobre su comportamiento y afirman: “A nosotros nos avergüenza que estos jóvenes, que dicen animar al club desde las peñas Orgullo Lagarto y The Nord Fans, sigan asistiendo al campo como si nada. Nos molesta, especialmente, que Orgullo Lagarto no depure responsabilidades entre sus propios integrantes.A los otros no les pedimos nada, porque su actitud pública nos parece deplorable, ya que se dedican a ensuciar las calles de nuestra ciudad con pintadas que destrozan el patrimonio”, revelan, al tiempo que agregan otro comentario.

“La gente de Jaén queremos asistir al campo con nuestros hijos tranquilamente para animar al equipo de la ciudad y trasmitirle todo el apoyo posible”, solicitan. Condenan de forma contundente los actos de violencia que se han protagonizado. “Nos repugna la violencia —afirman— y creemos que el deporte es ejemplo de todo lo contrario, por lo que no queremos que esté relacionada con la afición del Real Jaén. Deseamos que sea un ejemplo de afición comprometida con su equipo, pero con unos valores nobles que nos hagan ser reconocidos en el país.

Por otro lado, muestran su malestar por la imagen pública que ha ofrecido el Real Jaén en el acto de presentación de Nuno Silva. “Diga lo que diga el jugador, debería haber sido el personal del club el que no le debería haber permitido salir con esa camiseta. Nosotros somos un grupo de aficionados muy común. Cada uno tiene sus ideas y unos las defienden de una manera o de otra, hablando más de política o menos”, explican. El grupo de aficionados va más allá en sus reflexiones: “Creemos en los valores de la democracia y la tolerancia, independientemente de lo que piense cada uno. Por eso mismo creemos que es una vergüenza que un jugador del Real Jaén entre en el equipo luciendo la camiseta de un dictador. Eso, ya de por sí, es intolerable, pero el daño que ha hecho a la imagen del club, de la ciudad, y a una gran parte de la afición, es imperdonable y no se arregla con un simple comunicado”, lamentan.

Para terminar, los aficionados del conjunto blanco hacen una reflexión profunda y piden que se ofrezca otra visión. “Esto es inaceptable y hay que ponerle freno. Queremos que nuestro club tenga los mejores resultados posibles, pero creemos que tiene que ser un ejemplo en valores y la afición debe ser la primera en demostrarlo. Hay que echar a los violentos del fútbol, señalarles y no dejarles sitios en la grada. Y hay que hacerle entender a nuestros jugadores que tienen que ser ejemplares en su comportamiento. Llevar la camiseta del Jaén debe ser motivo de orgullo y eso nos lo tenemos que ganar todos, dentro del campo, pero también fuera del mismo”, concluyen el escrito.