“SOS” de Arconatura por la falta de personal voluntario
Desesperación en el seno de la Asociación Protectora de Animales y Plantas Arconatura con motivo de la falta de personal voluntario que ayude en las tareas de atención, cuidado y mantenimiento de los perros abandonados que tienen en acogida. El colectivo hace un llamamiento a la ciudadanía en general y a los amantes de los animales en particular con el fin de concienciar y sensibilizar de la falta de mano de obra necesaria que padece, la cual es “vital” para hacer frente a las tareas que ejecutan en los albergues.

“La situación actual de la protectora es de desbordamiento por la cantidad de abandonos que hay más los que se prevén ahora en verano, el número tan grande de perros a los que tenemos que atender y la falta de personas voluntarias que vengan a echarnos una mano en el refugio. La necesidad principal la tenemos en la gente, pues vendría bien contar con más personal para poder atender los dos albergues, tanto el viejo como el que tenemos en construcción”, afirmó Valentina Garrido, vicepresidenta de Arconatura.
Según explican desde la protectora linarense, en la actualidad solo hay apenas una decena de personas que colaboren en todo cuanto es preciso realizar a los animales. Sin embargo, lo ideal sería que hubiera hasta tres o cuatro voluntarios por cada uno de los turnos —tanto de mañana como de tarde—, ya que los perros precisan de atención constante todos los días del año. “Nosotros establecemos un cuadrante de turnos para ir organizándonos lo mejor que podemos e intentar que haya el numero justo de personas para que el turno del día se realice correctamente. Por esa razón hacemos un llamamiento para ver si la gente nos apoya, en un rato que tenga libre, y nos echa una mano con las tareas de limpieza y mantenimiento del albergue, así como para atender a los perros en lo que se refiere a su alimentación y estar con ellos”, afirmó Valentina Garrido.
Otra de las principales necesidades de Arconatura se presenta en las casas de acogida, pues también es muy importante la colaboración de familias que mantengan, en su hogar, a aquellos perros de menor edad que no puedan residir en unas condiciones óptimas en el albergue. Y es que el grado de saturación que se produce en las instalaciones de la protectora va en aumento, pues son cerca de trescientos los animales abandonados —entre los que viven en el refugio y los de acogida— a los que Arconatura presta ayuda para velar por su calidad de vida.
Con respecto a las obras de construcción del futuro albergue, aún se encuentran paralizadas a falta de conseguir los permisos y la documentación pertinente, así como la financiación necesaria para poder retomarlas. Pese a todo, la protectora hace uso de estas nuevas instalaciones, dentro de sus posibilidades, con la mirada puesta tanto en el arduo trabajo diario que debe realizarse como en que la cifra de abandonos de animales aumenta con la llegada de la época de vacaciones. “Insistimos en que hay que ser responsables con la vida animal”, aseveran.