Siria pone piedras en el camino hacia la paz pactada con la ONU

El Ejército Libre Sirio (ELS), principal grupo armado insurgente sublevado contra el régimen sirio, anunció que respetará el alto el fuego fijado para mañana en virtud del plan de paz propuesto por el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, que ya aceptó el Gobierno del presidente Bashar Al Assad.

    09 abr 2012 / 10:54 H.


    La situación en Siria continúa lejos de solucionarse, aunque hay abiertas vías para la esperanza. El ELS anunció que respetará el alto el fuego, fijado para mañana en virtud del plan de paz propuesto por Kofi Annan. “Nos comprometemos con la fecha fijada incluso si ellos (las fuerzas de Al Assad) no se retiran, y haremos un alto el fuego tal como se ha comprometido a la ONU”, afirmó el coronel Qassem Saad al Deen, portavoz del mando conjunto del ELS en declaraciones a Reuters desde el interior del país.
    “Pero si ellos disparan, tomaremos de nuevo las armas y les combatiremos”, advirtió el portavoz del grupo insurgente, formado principalmente por desertores del Ejército regular.
    Al Deen denunció, además, que al menos un millar de personas han muerto en la última semana por la violencia en todo el país, la mayoría civiles.
    Por su parte, el régimen del presidente Bashar Al Asad no retirará sus tropas desplegadas en las ciudades sirias antes de obtener “garantías escritas” de la oposición, según dijo ayer el portavoz sirio de Exteriores, Jihad Maqdisi en un comunicado.
    Jihad Maqdisi señaló que Annan no ha presentado “garantías escritas” sobre la aceptación del fin de la violencia por parte de “los terroristas” ni sobre el compromiso de Catar, Arabia Saudí y Turquía para que dejen de financiar a estos grupos.
    El régimen sirio consideró también que las últimas declaraciones de Annan en el Consejo de Seguridad de la ONU fueron interpretadas de manera “errónea”. El pasado lunes, Annan señaló en este organismo que Siria había aceptado mañana, 10 de abril, como la fecha límite para la aplicación de su plan de paz, que incluye el fin de la violencia y la retirada de las tropas gubernamentales de las ciudades y sus alrededores.
    El portavoz sirio destacó: “Siria no repetirá lo que sucedió con la (anterior) misión de observadores de la Liga Árabe, cuando sacó a sus fuerzas de las ciudades y los grupos armados aprovecharon para reorganizarse, armarse y llevar a cabo todo tipo de terrorismo”.
    Según su versión, las Fuerzas Armadas se vieron obligadas a “responder a los llamamientos de la población, proteger a los civiles y restaurar la seguridad de las ciudades sirias”.
    En ese sentido, Damasco también culpó a los grupos armados del incremento de la violencia en los últimos días, precisamente desde que Siria aceptase el plan de paz y les exigió que, además de detener la violencia, entreguen sus armas. Redacción / MADRID