Sin tregua en las cuentas

El Ayuntamiento de Jaén se mueve, económicamente, en el filo de la navaja. Siempre pendiente del enésimo balón de oxígeno o plan estatal que apuntale para el mes siguiente las cuentas imposibles de una institución quebrada. Algo a lo que nos hemos acostumbrado en España en los últimos años. De hecho, esta semana se conocía, por ejemplo, que varios partidos políticos arrastran deudas que los hacen inviables, ya que su deuda supera con creces su patrimonio y sus posibilidades de financiarse. En este sentido resulta paradójico que el ciudadano sufra en sus propias carnes sus desajustes presupuestarios y, sin embargo, instituciones y organismos públicos siempre encuentren el camino para sortear situaciones que acabarían en la bancarrota de cualquier familia. En el último pleno, el equipo de Gobierno del PP halló el apoyo necesario de C´s para engancharse a otro plan inmediato de ayuda que apuntale las nóminas y el día a día de esta mastodóntica institución que es el Ayuntamiento de Jaén. Así fue posible que salieran adelante la aprobación de reconocimientos extrajudiciales de deuda, renovaciones de pólizas y solicitudes, al Gobierno y a la Junta de Andalucía, de anticipos en los impuestos del Estado (PIE) y los de la comunidad autónoma (Patrica) y la adhesión al Fondo de Financiación de 2016. El ser el tercer ayuntamiento con la deuda más elevada de toda España impone unos caminos que, a la postre, conducen a hipotecar, y de qué manera, el futuro de la ciudad. Los partidos que gobernaron en democracia deberían ser capaces de consensuar una hoja de ruta única, sin atajos, con la que cimentar un modelo económico de ciudad. Pero para eso se requiere altura de miras.

    02 ago 2015 / 08:39 H.