Sigue la pelea socialista
Cuando todos parecen remar en la misma dirección, el río baja más revuelto que nunca. El escenario del Partido Socialista está compuesto de dos bandos claramente diferenciados y, en el centro, un cráter que se abre por horas. Ya no hay quién pare la crisis. Ni las elecciones del 20-N conseguirán amansar a las “fieras”. Los ciudadanos, que son los que votan en las urnas en cada cita electoral, son los que tendrán que sacar sus conclusiones después de la guerra abierta en el seno de un partido que ya no puede esconder un cisma abismal entre sus propios militantes. La proximidad de unos comicios generales, el próximo 20 de noviembre, es la excusa que prolonga una agonía que terminará en muerte política si los trastos siguen rulando por el aire antes de caer sobre alguna cabeza. La pelea sigue en el PSOE, aunque haya algún “despistado” que quiera esconderla.
La división se acrecienta día a día y, aunque suene a viejo, en este caso se presenta en un escenario con actores nuevos. Hay un grupo de dimisionarios que buscan desbancar a Carmen Peñalver de la Secretaría General del PSOE de Jaén y, si no llega a ser porque hay unas elecciones a la vuelta de la esquina, hoy el partido más votado en la provincia estaría en manos de una gestora. ¿Qué pasó el 29 de agosto? Que el mal llamado sector crítico presentó al líder socialista, Francisco Reyes, treinta firmas con las dimisiones, seis horas después de que el PSOE abriera el proceso electoral. Y la Ejecutiva Federal no admitió movimiento orgánico alguno en pleno proceso electoral. Desde entonces, algo ha llovido. Por un lado, se han escenificado respaldos a Carmen_Peñalver desde la dirección regional y, por otro, gestos y desencuentros desde la provincial. Los tiras y aflojas son constantes e, incluso, las palabras contradictorias entre un bando y otro. Porque así se llaman ellos mismos, los dimisionarios dicen que son “unos” y los afines a la Ejecutiva local, “otros”. Y viceversa. Las desautorizaciones por parte del secretario general del PSOE de Jaén hacia la responsable del partido en la capital son constantes y lo más curioso es que los dos se amparan en la Federal. Por ejemplo. Ayer la dirección municipal celebró una asamblea para consensuar una propuesta con los candidatos al Congreso y al Senado por Jaén. Carmen Peñalver dijo que la convocatoria estaba prevista para ayer por indicación de los secretarios de Organización de las ejecutivas provincial y regional. Sin embargo, Francisco Reyes señaló que la dirección nacional del partido desautorizaba esa cita.
No obstante, las discrepancias verbales se disipan cuando unos y otros hablan de las elecciones. Todas las miradas están puestas en esta trascendental cita en un momento especialmente complicado. En las filas socialistas jiennenses hay miedo a que, además de la pérdida de un diputado por población, se reste otro por votos. La representación de la provincia en Madrid está en juego y eso no hay pelea interna que haga que sus militantes miren hacia otro lado. Ahora importa mantener los treinta mil votos que suele tener Jaén en las generales._
Hay quienes piensan que lo que ocurre es que nadie contaba con el 20-N cuando explotó una crisis que se proyectó en los medios de comunicación y que ahí sigue. La aparente paz con la que terminó anoche la segunda asamblea local, donde algunos arroparon a Gaspar Zarrías y a la que nadie de la dirección provincial acudió a desautorizar, no existe. En el penúltimo capítulo de esta crisis imperó la tranquilidad. Sin embargo, quedan muchos más por escribir.