Sanción al Mercado de Futuros por "manipular" ventas de aceite de oliva
Duro golpe al prestigio y a la imagen del Mercado de Futuros del Aceite de Oliva (MFAO), que opera desde la Urbanización Azahar de Jaén para todo el mundo. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) asegura que desde su panel de control se manipuló el mercado y las operaciones, por lo que castiga a la empresa con una dura multa. Y eso que las alegaciones, al final, han funcionado para que las sanciones se quedaran en graves en vez de muy graves, lo que, prácticamente, hubiera supuesto el cierre de un instrumento clave para comprar y vender aceite.

Ya está escrito en el Boletín Oficial del Estado (BOE), lo que ha supuesto destapar un "escándalo" que se ha llevado en secreto. Nada había trascendido de la investigación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, que ponía en duda la transparencia del organismo y, al final, terminó en sanción. Se trata de un asunto tremendamente sensible porque siembra dudas.
El BOE informa de una multa de 15.000 euros al Mercado de Futuros del Aceite de Oliva por realizar prácticas de manipulación desde febrero de 2009 hasta noviembre de 2010. La CNMV afirma que proporcionaron indicios falsos o engañosos sobre la oferta, la demanda y el precio. Con los mismos argumentos se sanciona a su entonces director -hoy ya está fuera de la organización- con 20.000 euros. No obstante, hay más multas.
OTRO CASTIGO MÁS. La CNMV impone a la Sociedad Rectora del Mercado de Futuros del Aceite de Oliva otra sanción por cometer infracciones graves. Afirma que tiene claro que realizó actividades prohibidas a las Sociedades Rectoras e incumplir una circular sobre el registro de aplicaciones, operaciones de traspasos y regularizaciones. El Mercado de Futuros tendrá que pagar 15.000 euros por esta irregularidad, mientras que su director general, José Luis Alonso Fernández, 20.000 euros. La presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Elvira Rodríguez, firma la resolución que publica el Boletín Oficial del Estado, que va mucho más allá del castigo económico. Aquí puede haber daño al prestigio de la sociedad, que se basa en la confianza de los operadores que compran y venden aceite de oliva con entregas a futuros.