Salud paga por productividad en el Complejo Hospitalario unos siete millones de euros

Irene Bueno/Jaén
El Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha pagado, durante los últimos días de mayo, el Complemento de Rendimiento Profesional (productividad) que le corresponde a los trabajadores. Sólo en el Complejo Hospitalario de Jaén, la cifra global asciende a unos siete millones de euros.

    05 jun 2009 / 09:45 H.

    El pago de la productividad genera, cada año, polémica y malestar entre los trabajadores de los diferentes servicios y también de las distintas categorías. Las variaciones entre las cantidades que perciben unos y otros y el desacuerdo con los criterios que sirven para baremar y cuantificar esta “paga extraordinaria” hacen que las protestas de los profesionales se eleven ante las organizaciones sindicales que forman parte de la Junta de Personal. Algo más de 18.000 euros es la cantidad más alta que ha recibido un profesional del Distrito Sanitario de Jaén en concepto de productividad. Diez mil, doce mil, nueve mil son cifras también habituales para directores de centro de salud, jefes de área hospitalaria y responsables de grupos de investigación o de programa. En el vértice opuesto, auxiliares administrativos, celadores, planchadoras o pinches oscilan entre los trescientos y los quinientos euros.
    Los profesionales se cuestionan el porqué de tanta diferencia si todos estos trabajadores, cada uno en su puesto, puede realizar su cometido igual de bien. En concreto, profesionales del Distrito Norte de Jaén recogen firmas para presentar ante Salud un documento en el que solicitan que se modifiquen los criterios y, sobre todo, el poder de decisión en la asignación de la cantidad que corresponde a cada empleado en concepto de productividad. Recuerdan que el primer requisito para recibir más o menos dinero es la puntuación global que recibe el centro de salud o área hospitalaria en cuestión.
    También puntúa la actividad formativa y de investigación, en el caso de los médicos la prescripción de genéricos y la no derivación de pacientes a Atención Hospitalizada, y en general, la cantidad de quejas u hojas de reclamaciones recibidas durante el año. Si una unidad o área “suspende” en esta puntuación global, parte de su asignación se reparte entre las que obtienen buenas notas. El problema, en opinión de estos trabajadores, es que hay unidades que, por especialidad o por área de cobertura, tienen asignados a personas mayores, que necesitan más visitas al especialista o enfermos que no pueden ser tratados con genéricos, lo que reduce, considerablemente, la cantidad de dinero que reciben quienes los atienden.