Reyes Magos y Mecenas

Los Reyes Magos no son los padres. Qué va. Este año, por lo menos en Jaén, van a ser los emprendedores del lugar, los que todavía no están en números rojos. Si es que queda alguno oculto por ahí. No es que Melchor, Gaspar y Baltasar se vendan al mejor postor.

    15 dic 2011 / 23:00 H.

    La polémica está en la calle, pero tampoco hay que dramatizar, al contrario, aplaudir a los que quieran colaborar con la causa. Lo cierto es que no han transcendido muchos detalles de esta operación municipal, pero sí está claro que quien pague la Cabalgata tendrá mando en plaza para subirse el 5 de enero por la tarde a una de las carrozas y repartir caramelos desde lo alto del trono a diestro y siniestro. Al menos, así lo explicó muy didácticamente el propio alcalde, José Enrique Fernández de Moya, en su muro de facebook.
    Se trata de una medida provisional, transitoria, hasta que la situación económica salga del pozo negro en el que se encuentra. Y es comprensible que quien ponga euros de su bolsillo, tenga alguna recompensa. Como si un mecenas patrocina un espectáculo y le regalan algunas entradas o lo dejan pasar al camerino a darle un besico al artista en cuestión. Digo yo. La pena, quizás, es que hay mucha gente, (solo el año pasado fueron más de mil doscientos los que se presentaron al sorteo) a la que le hace especial ilusión encarnar a Sus Majestades de Oriente y, con este nuevo sistema, lo tienen realmente más complicado.
    Lo importante es encontrar soluciones a la precariedad supina de las arcas municipales, igual que ha pasado con el reciente Festival de Otoño, que salió adelante muy dignamente porque Cristina Nestares se tiró a la calle —en el buen sentido— en busca de patrocinadores sin que se le cayeran los anillos. Cuando lo fácil habría sido seguir tirando con pólvora del Rey como su antecesor en el cargo, Montané, o dejar impagos a diestro y siniestro sin el más mínimo remordimiento. 
    De todas formas, si yo fuera uno de esos Rey Magos mecenas cedería mi cetro y mi sillón para que se sorteara entre esos miles de reyes en potencia que este año se van a quedar con las ganas de serlo. Aunque, seamos sinceros, hace falta tener ilusión a raudales, que luego hasta te pueden llevar a los tribunales por darle un caramelazo a alguien.

    Publicado en la sección "Pongamos por caso" de la edición de Diario JAEN del domingo 11 de diciembre de 2011