La Plaza de las Atarazanas cobra brillo con un toque de modernidad
Javier Esturillo/Jaén
La vieja Plaza de las Atarazanas ha dejado de ser un rincón escondido, descuidado y simplemente de paso para transformarse en un nuevo espacio de “convivencia y concordia” para los vecinos y comerciantes de la zona. Su apertura fue motivo de fiesta para el Ayuntamiento y los residentes.
La vieja Plaza de las Atarazanas ha dejado de ser un rincón escondido, descuidado y simplemente de paso para transformarse en un nuevo espacio de “convivencia y concordia” para los vecinos y comerciantes de la zona. Su apertura fue motivo de fiesta para el Ayuntamiento y los residentes.
Nadie se perdió el acto, a pesar del frío. No faltó ni la Banda Municipal de Música de Jaén, que amenizó la inauguración y el posterior desayuno que ofreció el equipo de Gobierno a los presentes. La alcaldesa, Carmen Peñalver, y la concejal de Promoción Económica, María del Mar Shaw, estaban exultantes. Ellas han sido, en cierto modo, las artífices de que el “callejón de la uva”, nombre popular con el que se conoce al lugar, haya cambiado radicalmente de imagen. Losetas hexagonales con colores vivos, amplios bancos, un gran macetero y un anfiteatro preparado para albergar conciertos de música y obras de títeres son algunas de las novedades que presenta la Plaza de las Atarazanas.
“Me siento tremendamente orgullosa de que los vecinos puedan disfrutar de un punto de encuentro y de ocio. Esta es la ciudad que todos queremos”, aseguró la alcaldesa en su intervención pública. Sin embargo, no ha sido una reforma fácil. Las obras han sufrido varios retrasos, por lo que se ha empleado más tiempo del previsto. Pese a ello, es para “estar contentos”, dijo uno de los muchos vecinos que ayer se acercaron a la plaza para compartir un “momento tan especial”.
Los trabajos han sido financiados por el Ayuntamiento, la Diputación Provincial de Jaén y el Instituto Nacional de Empleo. Han costado alrededor de trescientos mil euros, de los que la Administración local ha pagado la mitad y, el resto, ha sido aportado a través de las subvenciones de los otros dos organismos públicos.
satisfacción. La satisfacción era plena entre los residentes y los comerciantes de la calle y del mercado de San Francisco. Al fin y al cabo, serán ellos los que más disfruten la plaza. El presidente de la Asociación de Vecinos Arco del Consuelo, Antonio Lozano, agradeció al Ayuntamiento el esfuerzo realizado para transformar el lugar. Los antiguos puestos de ropa y de especies ubicados en el centro del callejón se distribuirán a partir de ahora en torno al anfiteatro. También se ha cambiado la instalación eléctrica, el asfalto y se han colocado pequeñas zonas ajardinadas. El retraso ha merecido la pena, ya que el Ayuntamiento ha recuperado un espacio perdido, a pesar de encontrarse en pleno corazón comercial de la capital. Al final del acto, los asistentes brindaron con un café con leche bien calentito.