Rendidos ante la evidencia (1-4)
Torres conoce el oficio a la perfección y eludió caer en triunfalismos cuando su equipo ganó en Cartagena con el gol de Francis Ferrón. Incluso, en una entrevista anunció que su equipo tenía que acostumbrarse a sufrir en una categoría exigente y en la que no puede ofrecer una concesión. Dicho y hecho. El Granada B, un equipo que no parece un filial y que está formado por una auténtica torre de babel con jugadores de distintas nacionalidades, se mostró superior y pasó como un ciclón por el renovado césped de Linarejos.

El conjunto rojiblanco fue superior ya en la primera mitad a un Linares Deportivo que se estrenó ante su afición después de superar una travesía del desierto tras la desaparición en 2009. El Granada B supo interpretar el partido y buscó aprovecharse de la responsabilidad del debut. Marcó los tiempos de este periodo y en cada acercamiento llevó peligro al marco de Lopito. Un remate de cabeza del polaco Pawel Bochniewicz significó el 0-1 en el minuto 17. El Linares Deportivo trató de reaccionar, pero David Gámiz, exjugador del Loja, no fue el faro que alumbra el juego ofensivo local. En casi ninguna acción pudo contactar con Rafa Payán y Francis Ferrón. El Granada B estaba cómodo en el recién estrenado césped de Linarejos y Nico, diez minutos después, tuvo en sus botas el 0-2 con una excelente jugada individual que terminó con un disparo que salió fuera. En el segundo periodo, el filial rojiblanco salió con el objetivo de resolver por la vía rápida y no tardó en anotar el segundo gol con un lanzamiento lejano de Boateng, una de las estrellas de este conjunto. Esta diana enmudeció a los aficionados del Linares Deportivo, que estaban maravillados por la sinfonía de buen juego del cuadro entrenado por José Miguel Campos, pero los locales tiraron de casta, esfuerzo y estrategia. Son un equipo que mantiene la base de la pasada campaña y es un hecho que aprovecharon en Cartagena y que ayer tuvo a Rafa Payán como goleador. El resultado se le complicó a los visitantes. Matheus fue expulsado por doble amarilla y el Granada B se quedó con diez futbolista, pero es una formación con mayúsculas y superó en todo momento al Linares con dos tantos más.