Reacción de ensueño para la primera victoria en casa (5-1)
El gol se resistió, pero cuando llegó lo hizo en cinco ocasiones en diez minutos mágicos, en los que el pabellón de La Salobreja ardió como si se tratara de una caldera encendida a su máxima potencia. No fue fácil la victoria, porque el Azkar Lugo tuvo durante 28 minutos a un frontón llamado Óscar Iglesias. El portero sostuvo a su equipo frente a un Jaén Paraíso Interior sin acierto en ataque, pese a que apostó por un fútbol sala dinámico, con rápidas transiciones y con jugadores que intercambiaron continuamente las posiciones. Los gallegos, conocedores de su inferioridad, trabajaron a destajo durante los 40 minutos, pero la lógica se cumplió en esta ocasión.
El Jaén Paraíso Interior no se rindió y tuvo un argumento que le benefició: la paciencia para superar a un rival encerrado y que buscó en la presión lograr su primer triunfo. Los locales sometieron a un total acoso al Azkar con disparos desde todas las posiciones, pero surgió la figura de Óscar Iglesias. Por arriba, por abajo y a media altura frenó en seco las intenciones de los locales de marcharse al descanso con empate en el marcador. Fabián Robledo, Chino, Cuco, Carlinhos y, en especial, Dani Martín fueron los protagonistas de las ocasiones de gol. Este último, recuperado de una lesión, tuvo cuatro consecutivas, pero Iglesias ni se inmutó. Sin embargo, Iago Rodríguez puso por delante al Azkar con un lanzamiento ajustado y desde fuera del área.
El guion no varió en el comienzo del segundo periodo, pese a que el equipo que entrena Javier Albes trató de dificultar la salida del balón de los locales. El Jaén Paraíso Interior empezó pronto a acumular ocasiones de peligro. Eloy Rojas, en dos ocasiones, Robledo y Jordi Campoy comandaron la ofensiva, pero otra vez estuvo acertado el meta visitante, hasta que en el minuto 8 Carlinhos rompió el maleficio con un tanto de lanzamiento raso. Quince segundos después, Emilio Buendía puso el 2-1 en jugada personal, y dos minutos después Jordi Campoy en una acción de estrategia situó el 3-1. El Azkar trató de reaccionar, tuvo que cambiar su forma de jugar y buscó arriesgar y generar ocasiones, pero el cuadro local se defendió bien. Mimi ejerció de portero-jugador en los últimos cinco minutos, pero fue una apuesta que no ofreció un resultado positivo, porque Chino robó un balón y marcó el quinto a meta vacía. Con el 4-1, el partido quedó resuelto, pero el marcador creció más. El capitán José López logró el quinto en un lanzamiento potente. Fue el colofón a la primera victoria de la temporada en casa. El equipo tiene licencia para soñar con la Copa de España. Ya suma ocho puntos en cuatro partidos. Una renta importante y que lo sitúa como candidato a retos ambiciosos. Por el momento, los amarillos ya son cuartos.