Ratificada la condena para el joven que degolló a su novia en Úbeda
Rafael Abolafia/Jaén
El Supremo ha confirmado los 19 años de prisión impuestos por la Audiencia Provincial de Jaén a Juan Ángel M. Y., el joven que degolló a su novia en el cuarto de baño del pub de Úbeda en el que trabajaba. El Alto Tribunal ha desestimado todas las alegaciones planteadas por el asesino.
El Supremo ha confirmado los 19 años de prisión impuestos por la Audiencia Provincial de Jaén a Juan Ángel M. Y., el joven que degolló a su novia en el cuarto de baño del pub de Úbeda en el que trabajaba. El Alto Tribunal ha desestimado todas las alegaciones planteadas por el asesino.
En junio de 2008, un tribunal del jurado declaró culpable de asesinato a Juan Ángel M. Y. Lo hizo por unanimidad en una deliberación que duró apenas seis horas. La magistrada de la Audiencia Provincial, Esperanza Pérez Espino, le impuso una condena de 19 años de prisión. En noviembre de 2008, esa sentencia fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. No obstante, la defensa de Juan Ángel M._Y. volvió a recurrir el fallo ante el Supremo. Básicamente, solicitaba a la Justicia que tuviese en cuenta que había matado a su novia como consecuencia de la ingesta de alcohol y en un arrebato provocado por los celos. Los magistrados del Alto Tribunal han “tumbado” ambas peticiones y dicen que no hay lugar a la admisión del recurso de Juan Ángel M. Y. Por ello, confirman íntegramente la sentencia dictada por Esperanza Pérez Espino, que recoge un castigo de 19 años de prisión. La magistrada justificó la severidad de la condena en un hecho: la frialdad que demostró Juan Ángel M. Y. para cometer el crimen. Hay que recordar que el joven discutió con su novia cuando ambas estaban a solas en el interior del pub de Úbeda en el que ella trabajaba. Primero, el acusado le dio un puñetazo en la nariz que la hizo sangrar. Cuando la víctima se dirigió al servicio para limpiarse, Juan Ángel M. Y. cerró la puerta de entrada al local, evitando así que alguien pudiera entrar o que su novia pudiera salir. Cogió el cuchillo de cortar los limones y fue hasta los aseos del pub. Allí, le dio cinco puñaladas en el abdomen, dos en el cuello y, finalmente, le hizo un corte en la garganta. Mortal de necesidad. “Mostró un desprecio a la vida de ella, una actitud que se hizo patente al escupir en el inodoro cuando cometió el crimen”, argumentó la magistrada en la sentencia ahora ratificada por el Supremo. Además, la juez recordó que el asesino no prestó ayuda médica a la víctima, sino que prefirió irse a su casa para ducharse, quemar la ropa que llevaba en una hoguera, deshacerse del cuchillo y borrar así cualquier prueba incriminatoria. Después, se fue a un bar para ver un partido de fútbol y, por último, se presentó en el lugar de los hechos aparentando que no sabía nada de lo que había ocurrido. La defensa de Juan Ángel M. Y. planteó en su recurso que no había habido alevosía en el crimen, que el apuñalamiento se produjo en mitad de una discusión._Sin embargo, los magistrados del Supremo coinciden con el Tribunal del Jurado: “Fue un ataque súbito e inesperado, que eliminó toda posibilidad de defensa de la víctima. Ese es el elemento objetivo de la alevosía”, argumentan los jueces. Además de los 19 años de prisión, la Justicia también condenó a Juan Ángel M. Y. a pagar a los padres de Ana Belén González Simón una indemnización de 200.000 euros. El asesino se declaró insolvente desde el principio del procedimiento judicial seguido contra él. El padre de la víctima, Antonio González, reclamó al Gobierno que endureciera los castigos a los criminales: “Hay que cambiar la Ley, porque matar sale muy barato en este país”, aseguró a JAEN.