“Raphael es patrimonio de todos”
El periodista Enrique Alonso fue el encargado de dedicar unas palabras a Raphael en representación de sus compañeros de la Redacción de Diario JAÉN. El redactor, linarense al igual que el artista, hizo un íntimo repaso por sus vivencias y recuerdos y de la emoción que representa para sus paisanos contar con una figura de la talla de Raphael. Ahondó en la proyección internacional que ha conseguido esta tierra gracias al “Niño de Linares”, que siempre ha defendido, con orgullo, que es andaluz, de Linares y de Jaén. Este es el discurso íntegro que pronunció Enrique Alonso:
“Te recuerdo, Raphael, desde pequeño, sentado en la sillita, mientras que cantabas en la Piscina ‘Benidorm’. Mis padres me hablaban de tus conciertos inolvidables porque siempre has cantado a nuestra Feria de Linares. Te recuerdo, con un Teatro Olympia repleto de público que se ponía en pié y no paraba de aplaudirte. Te recuerdo, Raphael, un 24 de febrero de 1996, rodeado de una multitud de gente que te quiere convirtiendo la calle Orfila en la de Raphael. Qué apreturas, cuánto cariño, cuánto fuego y pasión para nuestro artista más universal.
“Me acuerdo de ti, con Natalia y con tus hijos, por los pasillos de nuestro Ayuntamiento cuando tu mujer fue gran embajadora de nuestra ciudad, un 27 de agosto de 1996. Qué nervios junto a tus hijos, qué felicidad para una ciudad. Te recuerdo, radiante y lleno de vida, vestido de blanco en el balcón de nuestro Ayuntamiento después de dar el pregón de la Feria aquel 2003. Atrás quedaba todo. Te convertiste también en un gran ejemplo de vida para muchas personas que peleaban para seguir tu camino. Y naciste, al igual que aquel 5 de mayo de 1943. Pero lo celebramos con mucha más felicidad porque ya te conocíamos, ya te queríamos, ya no te podíamos arrancar de nosotros”.
Te recuerdo Raphael, como Jiennense del Año. Me acuerdo de ti, ese 2004, cuando estuviste con todos nosotros, otra vez aquí, en tu casa, en Diario JAÉN. Desde entonces, te hemos visto. También te hemos añorado. Te hemos tenido y te hemos echado de menos. Qué suerte tenerte hoy aquí. Te recuerdo cuando paso por el Pósito, tu casa, tu museo. El sueño de muchos que echó a caminar con Juan Valcárcel. Allí están tus trajes, tus discos, tus fotografías, muchos de tus recuerdos y mucho del orgullo que tus paisanos sentimos por ti. Te recuerdo en teatros y ferias, Raphael, porque tú eres un poco patrimonio de todos. Te recuerdo, Raphael, porque tú eres un niño de Linares, como yo”.
“Porque no hay Nochebuena sin ti —con la televisión en blanco y negro o en color, qué más da—, porque tú eres aquel y sigues siendo aquel. Te queremos Raphael, porque sabemos que tú nos quieres. Nosotros hemos hecho de tu voz, nuestro equipaje, tal y como lo has cantado. Nos has llevado contigo por el mundo y hablabas de tu tierra, de nuestra tierra, con tanto cariño que nos hacías sentirnos muy orgullosos. Tus palabras eran un ropoponpón, ropopoponpón que nos elevaba hasta las estrellas”.
“Tú eres eterno caminante, convencido de que hay mucho más amor que odio, más besos y caricias que mala voluntad. Por eso, te queremos, digan lo que digan, los demás. Y aquí, en nuestra tierra, también hemos tenido tiempos de balada triste de trompeta, por un pasado que murió. Pero queremos superar la tristeza y el mal, y las penas del mundo, porque queremos escuchar los violines cantar, en un futuro con rumbo”.
“Porque Jaén es Linares y Linares es Jaén, porque olemos a olivo, sabemos a aceite y sonamos a canción de Raphael. Porque crearon el uranio para darte a ti un disco, porque los Niños de Linares, cuando viajamos por el mundo, decimos que somos de la tierra de Raphael”.
Recuerdos. “Me han contado muchas cosas de ti. Me han dicho que tu gran amiga, Rocío Jurado, te llamaba Rapi, que tienes fans que te siguen por todo el mundo, que los cantantes te llaman maestro, que tu voz no tiene época, que tu música no tiene fin, que tus canciones se cantan en todo el mundo, que Rafael Martos, con su camisa negra, se convierte en el gran Raphael. Y que el gran Raphael va más allá del escenario. Es un genio, igual que Picasso, Dalí, García Lorca, Cervantes o, ya que los dos somos de Linares, Manolete. Lo que hubiera dado Nueva York por tenerte, Raphael. Pero, nosotros no te cambiamos por Frank Sinatra. Nos quedamos con nuestro Raphael”.
Tus palabras y tu cariño, nos han puesto el corazón en carne viva. Hoy, además de un gran artista, tenemos a un maravilloso corazón, maravilloso. No dejes nunca se soñar, yo te lo pido. No dejes nunca de sentir las emociones, si son emociones que con tu tierra has vivido. Te doy las gracias, por lo bien que tú lo has hecho. Porque Raphael, tenerte de paisano, es un escándalo”.
“Eres un trocito de todos nosotros, un olivo al que contemplar, un aceite del que presumir, una mina con la que enriquecerse, una sierra para descansar, un orgullo, un decir: Soy de la Tierra de Raphael y, entonces, el mundo mira a Jaén. Porque solo tú llenas el Santiago Bernabeu, mientras que Cristiano Ronaldo y Messi necesitan juntarse los dos y jugar con veinte futbolistas más”.
Con mucho orgullo. “Sabemos que, como tú nos amas, pocos nos amarán, porque lo haces con la fuerza de los mares, con el ímpetu del viento, lo vemos en la distancia y en el tiempo, lo haces con tu alma y con tu sangre. Nos amas como la persona a sus recuerdos, a puro grito o en silencio y de una forma sobrehumana. Porque Jaén huele al olivo, sabe a aceite y suena a Raphael. Hoy he escrito esta glosa, con el orgullo de un Niño de Linares. Casi todas estas palabras no son mías. Son parte de tus canciones, de tu vida, de nuestra vida. Forman parte de esa voz que ha sido nuestro equipaje, de ese artista que siempre te has marchado para traernos mucho más. Tenerte de paisano es un escándalo y, verte hoy con nosotros en el periódico de mi gente, de tu gente, de nuestra gente, mucho más. Nos haces muy felices a la familia de Diario JAÉN”.
“Sabemos que tienes ilusiones, como cuando eras un niño. Que te das por entero, cuando encuentras cariño. Y que te olvidas de todo, cuando empiezas a cantar. Por eso, estamos aquí para quererte, estamos aquí para adorarte, estamos aquí para decirte: ¡Gracias Raphael!”.
El artista se mostró emocionado y destacó todas las palabras de cariño que le habían dado en su visita a Diario JAÉN. “Estoy muy emocionado en este momento con todas estas palabras que me han largado. Resulta muy difícil mantener la compostura después de escuchar tantas cosas bonitas que me habéis regalado”, dijo. Asimismo, solicitó a Enrique Alonso que le enviara su discurso. Quiere conservarlo entre su gran colección de recuerdos.
“Te recuerdo, Raphael, desde pequeño, sentado en la sillita, mientras que cantabas en la Piscina ‘Benidorm’. Mis padres me hablaban de tus conciertos inolvidables porque siempre has cantado a nuestra Feria de Linares. Te recuerdo, con un Teatro Olympia repleto de público que se ponía en pié y no paraba de aplaudirte. Te recuerdo, Raphael, un 24 de febrero de 1996, rodeado de una multitud de gente que te quiere convirtiendo la calle Orfila en la de Raphael. Qué apreturas, cuánto cariño, cuánto fuego y pasión para nuestro artista más universal.
“Me acuerdo de ti, con Natalia y con tus hijos, por los pasillos de nuestro Ayuntamiento cuando tu mujer fue gran embajadora de nuestra ciudad, un 27 de agosto de 1996. Qué nervios junto a tus hijos, qué felicidad para una ciudad. Te recuerdo, radiante y lleno de vida, vestido de blanco en el balcón de nuestro Ayuntamiento después de dar el pregón de la Feria aquel 2003. Atrás quedaba todo. Te convertiste también en un gran ejemplo de vida para muchas personas que peleaban para seguir tu camino. Y naciste, al igual que aquel 5 de mayo de 1943. Pero lo celebramos con mucha más felicidad porque ya te conocíamos, ya te queríamos, ya no te podíamos arrancar de nosotros”.
Te recuerdo Raphael, como Jiennense del Año. Me acuerdo de ti, ese 2004, cuando estuviste con todos nosotros, otra vez aquí, en tu casa, en Diario JAÉN. Desde entonces, te hemos visto. También te hemos añorado. Te hemos tenido y te hemos echado de menos. Qué suerte tenerte hoy aquí. Te recuerdo cuando paso por el Pósito, tu casa, tu museo. El sueño de muchos que echó a caminar con Juan Valcárcel. Allí están tus trajes, tus discos, tus fotografías, muchos de tus recuerdos y mucho del orgullo que tus paisanos sentimos por ti. Te recuerdo en teatros y ferias, Raphael, porque tú eres un poco patrimonio de todos. Te recuerdo, Raphael, porque tú eres un niño de Linares, como yo”.
“Porque no hay Nochebuena sin ti —con la televisión en blanco y negro o en color, qué más da—, porque tú eres aquel y sigues siendo aquel. Te queremos Raphael, porque sabemos que tú nos quieres. Nosotros hemos hecho de tu voz, nuestro equipaje, tal y como lo has cantado. Nos has llevado contigo por el mundo y hablabas de tu tierra, de nuestra tierra, con tanto cariño que nos hacías sentirnos muy orgullosos. Tus palabras eran un ropoponpón, ropopoponpón que nos elevaba hasta las estrellas”.
“Tú eres eterno caminante, convencido de que hay mucho más amor que odio, más besos y caricias que mala voluntad. Por eso, te queremos, digan lo que digan, los demás. Y aquí, en nuestra tierra, también hemos tenido tiempos de balada triste de trompeta, por un pasado que murió. Pero queremos superar la tristeza y el mal, y las penas del mundo, porque queremos escuchar los violines cantar, en un futuro con rumbo”.
“Porque Jaén es Linares y Linares es Jaén, porque olemos a olivo, sabemos a aceite y sonamos a canción de Raphael. Porque crearon el uranio para darte a ti un disco, porque los Niños de Linares, cuando viajamos por el mundo, decimos que somos de la tierra de Raphael”.
Tus palabras y tu cariño, nos han puesto el corazón en carne viva. Hoy, además de un gran artista, tenemos a un maravilloso corazón, maravilloso. No dejes nunca se soñar, yo te lo pido. No dejes nunca de sentir las emociones, si son emociones que con tu tierra has vivido. Te doy las gracias, por lo bien que tú lo has hecho. Porque Raphael, tenerte de paisano, es un escándalo”.
“Eres un trocito de todos nosotros, un olivo al que contemplar, un aceite del que presumir, una mina con la que enriquecerse, una sierra para descansar, un orgullo, un decir: Soy de la Tierra de Raphael y, entonces, el mundo mira a Jaén. Porque solo tú llenas el Santiago Bernabeu, mientras que Cristiano Ronaldo y Messi necesitan juntarse los dos y jugar con veinte futbolistas más”.
“Sabemos que tienes ilusiones, como cuando eras un niño. Que te das por entero, cuando encuentras cariño. Y que te olvidas de todo, cuando empiezas a cantar. Por eso, estamos aquí para quererte, estamos aquí para adorarte, estamos aquí para decirte: ¡Gracias Raphael!”.
El artista se mostró emocionado y destacó todas las palabras de cariño que le habían dado en su visita a Diario JAÉN. “Estoy muy emocionado en este momento con todas estas palabras que me han largado. Resulta muy difícil mantener la compostura después de escuchar tantas cosas bonitas que me habéis regalado”, dijo. Asimismo, solicitó a Enrique Alonso que le enviara su discurso. Quiere conservarlo entre su gran colección de recuerdos.
