Proactividad colectiva en el difícil camino hacia el empleo
Favorecer la inserción sociolaboral de personas desempleadas mediante un enfoque diferente, basado en la proactividad, el trabajo colectivo, la intercooperación y el apoyo mutuo, para poder lograr el objetivo común de encontrar un trabajo. Esa es la esencia de la Lanzadera de Empleo y Emprendimiento Solidario, una innovadora iniciativa puesta en marcha por la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía, a través de Andalucía Emprende, y que cuenta con un total de veinte personas formando parte de la misma en la ciudad.
Iniciado el pasado mes de marzo, en las instalaciones del Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial (CADE), el proyecto de la Lanzadera de Empleo se prolongará hasta el 31 de julio y lo que pretende es que sus integrantes, personas desempleadas de diferentes perfiles y nivel formativo, participen en el arduo proceso de la búsqueda de empleo con una actitud proactiva y optimista, de tal forma que descubran y pongan en práctica todas las aptitudes, habilidades y competencias que poseen.
“La lanzadera es algo innovador porque se apoya en la fe y en el valor de las personas, considerándolas como desempleadas, no como paradas. Es decir, personas válidas, cualificadas y con un gran potencial para acceder al mercado laboral. La gente que lleva tiempo desempleada suele caer en el desánimo y abandona la búsqueda, de ahí que lo que se busca es que recuperen la ilusión y adquieran competencias. Todo eso se hace mediante la metodología del ‘coaching’ para sacar el máximo rendimiento”, explicó María Ángeles Rodríguez, coordinadora de la Lanzadera de Empleo en la ciudad de Linares.
A través de la unión e interconexión de sus integrantes, la Lanzadera de Empleo sirve para compartir conocimientos y experiencias, reforzar las competencias formativas y laborales de sus miembros, así como la colaboración y valores solidarios. “Se trabaja en sesiones grupales e individuales varios aspectos como el crecimiento y el desarrollo personal a través del autoconocimiento, para que ellos redescubran el potencial que tienen. También realizamos talleres de comunicación para que se afronten mejor las entrevistas de trabajo y, sobre todo, hacemos hincapié en la presencia en redes sociales, pues son un canal más que debe tenerse actualizado para la empleabilidad”, señaló Rodríguez.
Asimismo, otro de los “puntos fuertes” de la Lanzadera de Empleo es el contacto continuo y la intermediación con empresas de diferentes sectores profesionales. Una práctica que, según explicó la coordinadora del programa, ofrece unos resultados positivos puesto que “nos dirigimos a las empresas, reciben a los participantes, los escuchan y ellos pueden demostrar las capacidades y competencias que pueden aportar”. “Es esencial poner como valor la marca personal para diferenciarse del resto. Se trata de saber mostrar a las empresas qué pueden ofrecer nuevo y diferente, de ahí que resulten muy importantes las dinámicas, simulaciones, talleres y actividades que hacemos”, agregó María Ángeles Rodríguez.
Hasta la fecha, ya se ha producido la contratación de diez de las veinte personas desempleadas que forman parte de la Lanzadera, mientras que otras dos han retomado la actividad estudiantil para preparar unas oposiciones y se esperan otras posibles contrataciones en este mes. Unas cifras que devuelven la ilusión en este contexto de crisis.