Primero de Mayo que olvida a los niños esclavos
Guadalupe Molina Díaz desde Úbeda. Hoy los niños esclavos no cesan de aumentar porque son fundamentales en el perverso modelo económico actual y son el soporte de nuestra sociedad de consumo; pero que sin embargo no existen para el sindicalismo del siglo XXI. Hoy, celebrar el Primero de Mayo debería suponer clamar por la dignidad de esos 400 millones de niños, principales víctimas de esta economía canalla.
02 may 2012 / 10:49 H.
Demasiado pedir para estos sindicatos mayoritarios que, hace ya décadas, prefirieron el camino de la domesticación en forma de concertación. Nuevas realidades laborales habrá que crear, que vuelvan a poner como innegociable la dignidad de toda persona, incluidos los niños esclavos, cuyo único trabajo debiera ser jugar y educarse.