'Preocupación' por la salud de un quesadeño que se cayó de un árbol
Quesada tiene el corazón en un puño desde que, el domingo por la tarde, E. C. A., “un buen muchacho” de 31 años, se cayera de un árbol cuando intentaba desmontar la carpa de la concentración motera que se había celebrado durante el fin de semana. Desde entonces, se encuentra en coma.
“Estamos todos preocupados”, confiesa el alcalde de Quesada, el socialista Manuel Vallejo. Desde el domingo por la tarde, E. C. A., un joven del municipio de 31 años, permanece ingresado en el Hospital Neurotraumatológico de Jaén en estado de coma, después de que se cayera desde un árbol y se golpeara en la cabeza, como explica Vallejo. El suceso se registró el domingo sobre las seis y cuarto de la tarde y fue el funesto colofón a la concentración anual que, “por estas fechas” —dice el regidor quesadeño—, organiza el Club Motero Medievales.
Desde el viernes, las actividades moteras se habían sucedido, tanto en Quesada como en la comarca, y estaba previsto que la fiesta concluyera a mediodía. “Todo había transcurrido sin incidentes”, apunta Vallejo. Pero la desgracia llegó en el momento de la recogida. “Estaban desmontando la carpa que se había instalado para la concentración [en el recinto ferial de Quesada]”, cuando el joven accidentado se subió a un árbol para colaborar y desatar una de las cuerdas que la sostenían y se precipitó al suelo por causas que se desconocen.
En un primer momento, E. C. A. fue llevado hasta el centro de salud del municipio, pero, dada la gravedad de su estado, se dio la alerta a los servicios sanitarios del 061, que lo trasladaron en helicóptero hasta el Hospital Neurotraumatológico de la capital. Desde entonces, se encuentra en estado de coma, aunque Vallejo indica que “está estabilizado”.
Según Manuel Vallejo, el accidentado, que se dedica a la construcción, era aficionado a las motos y se encontraba en esta concentración porque se daba la circunstancia de que también pertenece al club motero, informa Europa Press.
Para Quesada y para sus vecinos, este ha sido un terrible golpe, ya que el joven E. C. A. pertenece a “una familia muy conocida” y es un “buen muchacho”, destaca el alcalde. La preocupación, por tanto, es mayúscula, así como la expectación por todo lo concerniente a la evolución del estado de salud del joven.
Nuria López Priego / Jaén