Premio a la constancia del Club Voleibol Linares
Rafael Alegre y el resto de socios fundadores del Club Voleibol Linares no podían imaginar que en tan solo dos años pasarían de tener diez jugadores a más de cuarenta en categoría sénior —masculino y femenino— y otros tantos en la cantera en un deporte de escasa tradición en la Ciudad de las Minas. Sin embargo, el insistente trabajo de promoción, a través de las redes sociales, el boca a boca y los torneos interescolares han hecho que cada vez sea más la gente que se acerque al pabellón Andalucía a practicar el voleibol.

“Estamos muy contentos con la respuesta de la gente, sobre todo de las niñas. No es fácil en una ciudad con tantas modalidades deportivas, pero una vez que nos conocen y lo prueban, deciden quedarse”, asegura Rafael Alegre, uno de los impulsores del voleibol en Linares. Y todo ello sin competir, porque una de las peculiaridades del club linarense es que, en sus tres años de existencia, no ha disputado un partido en competición oficial, algo que en otras especialidades sería impensable. Hasta el momento, su trayectoria se limita a torneos amistosos con equipos de la provincia y de fuera, mediante invitación, como el que disputarán este fin de semana en Tomelloso. Para Rafael Alegre es todo un reto, además de una satisfacción, que tengan en cuenta al club. “Es ilusionante que se pongan en contacto con nosotros para jugar. Intentamos participar en todos los torneos, ya que es la mejor forma de estar activos”.
Otra de las bazas es la formación para crecer. Desde su fundación, el CV Linares ha tenido vocación de cantera y, por ello, no han dudado en acudir a los centros educativos para dar a conocer su proyecto, con un resultado más que satisfactorio. “La acogida entre los profesores ha sido sensacional. Trabajamos con los alumnos de la ESO y de Bachillerato y el resultado no puede ser mejor”, asegura Rafael Alegre.
En el torneo de Tomelloso tendrán una buena oportunidad para comprobar su nivel ante otros clubes, como el Vilches, La Roda y el equipo local, en las categorías infantil, cadete y sénior. “Estamos muy ilusionados y esperamos regresar con un buen sabor de boca, si bien es cierto que, en este tipo de citas, lo importante es jugar y disfrutar del voleibol”, destaca. Sea como fuere, el club ha conseguido despertar entre los jóvenes el interés por una especialidad que tantas alegrías ha dado al deporte español.