Por una vivienda digna

A veces contar con un techo no es suficiente para vivir con dignidad y tranquilidad en una morada.

07 may 2015 / 10:57 H.

De hecho, la familia de Luis José Valdés conoce lo que significa padecer una enfermedad que se agrava por el contexto espacial. Según cuenta el jiennense, son seis los años que lleva solicitando a la Administración andaluza que les cambien de residencia. El quinto piso de uno de los bloques conocidos como las 101 viviendas, en el Bulevar, en el que reside con su esposa y sus dos hijos de 21 y 11 años, es perjudicial para los males que sufre la mujer. “Lo que pedimos es un traslado de vivienda, porque mi esposa tiene 19 enfermedades, algunas tratadas en psiquiatría y también por la falta de movilidad que padece”, cuenta Valdés, quien añade otro motivo: “Además, no nos llevamos bien con los vecinos”, confiesa.

De hecho, Luis José Valdés asegura que el médico le llegó a indicar que, si su esposa sigue viviendo en el piso actual, irá empeorando. “La energía que hay allí, en esos bloques, es muy negativa para ella. Y lo que hace es ponerla peor. Además, ella sufre desmayos a consecuencia de la medicación y es peligroso cuando sube las escaleras”, cuenta el vecino.

A pesar de las reiteradas veces que la familia ha acudido a solicitar a la Delegación un cambio de vivienda, la respuesta, según Valdés, es la espera. Sin embargo, la demora, que se ha alargado más de un lustro, aumentó la desesperación de la familia. “Se lo hemos pedido varias veces y siempre nos dicen que ya nos llamarán cuando salga algo”, dice Luis José Valdés, quien apunta que es la Junta la única Administración a la que se dirigen. “Hemos ido donde nos pueden dar solución”.

Una vivienda adaptada a las limitaciones de la madre

En este sentido, Luis José Valdés y su hija Lourdes tomaron la opción de la protesta. “Nos pusimos en contacto con los integrantes de la ‘Acampada esperanza’. Ellos nos han pedido una cita para mañana [por hoy], pero no sabemos si nos darán una solución ya o lo retrasan”, indica el jiennense, quien explica que pasarán la noche en el jardín que hay frente a la Delegación de Vivienda.
movimiento. Algunos integrantes de la Acampada Esperanza acudieron a apoyar la situación de la familia Valdés. “Lo que piden es un traslado a cualquier ciudad; de hecho, podrían pagar una cantidad del alquiler. El problema que tienen es debido a las 19 enfermedades que sufre la mujer, por lo que pedimos a la Junta o al Ayuntamiento que les cambien a una vivienda adaptada a las limitaciones de ella”, manifiesta el portavoz del colectivo, Cristian Sirres.

“Acampada esperanza” surgió tras el desalojo de María del Carmen Cruz y el propio Cristian Sirres hace dos meses. Desde entonces, diferentes vecinos se sumaron en apoyo a las familias que sufren desahucios de sus viviendas. “Estamos investigando los pisos vacíos e intentando ayudar a las familias afectadas”, explica Sirres, uno de los promotores.

La Junta dice que hay 38 familias en lista de espera

El delegado de Vivienda, Rafael Valdivielso, que recibirá esta mañana a los afectados, recuerda que la familia de Luis José Valdés se encuentra en lista de espera y que delante de ellos hay 38 casos más. “Si les cambiara de piso, las otras personas se quejarían y no sería justo”, manifiesta Valdivielso.

Conocedor del caso de Valdés, el responsable de la Delegación territorial subraya que, no solo no hay viviendas para realojarlos, sino que este caso en concreto no reúne los requisitos necesarios para un traslado urgente. “Además, no contamos con un informe médico que justifique las dificultades de la mujer”, apunta. El delegado insiste en la necesidad de convocar la comisión de seguimiento de las 101 viviendas.