Poesía canalla y sin censura
Anécdotas “canallas”, viejos recuerdos de su infancia en la ciudad de Úbeda y versos. Rimas que recuerdan a Bukowski, a Bob Dylan y a Leonard Cohen. Poesía visceral, sincera, sin tapujos, llena de sexualidad y de golpes a la vida. Una faceta desconocida para muchos, y que evidencia que la poesía sigue viva, a cargo de maestros como Joaquín Sabina y Benjamín Prado.

Dos figuras cuyo poder de convocatoria colmó la iglesia de San Lorenzo, y la Casa de las Torres, en la que se retransmitía paralelamente la tertulia poética enmarcada dentro de la segunda edición de “Sabina por aquí”.
Poemas para Dylan, Alberti y algún que otro amor de juventud. Prado también se lanzó a recitar algunos de los versos que escribió para él Sabina y el propio cantante dedicó unos momentos para ofrecer al público una de las cartas que escribió a su compañero Luis García Montero, que aunque estaba previsto, no pudo estar presente durante esta segunda jornada.
Así a lo largo de la tarde, uno de los géneros literarios más incomprendidos y a veces, incluso marginados, se convirtió en el protagonista gracias a la voz del que es sin duda, uno de los personajes más significativos de la ciudad de Úbeda. “La poesía no tiene que ser ni incomprensible ni aburrida. Cuando nos subimos a un escenario intentamos que las nuestras no lo sean”, dijo Sabina acompañado sobre las tablas de Benjamín Prado. Aunque todavía no hay fecha estimada para su próximo trabajo discográfico, si expresó su intención de vincularse más con la ciudad de Úbeda. De esta forma, explicó que le gustaría que su nombre no sirva como homenaje, sino como un pretexto para seguir con el progreso que se está haciendo en el ámbito cultural. “No me refiero solo a un barrio, sino también a una ciudad que estaba bastante huérfana de cultura, que no fuera procesional y semanasantera”, dijo el cantautor ubetense.
El encuentro estrictamente poético, enfocado más a esta faceta del artista, tuvo una grata sorpresa en su comienzo. “Y sin embargo”, conocido tema dentro de la carrera musical de Sabina sonó a cargo de las voces de la Agrupación Coral Ubetense. Una interpretación que estalló en aplausos y ovaciones por parte de asistentes y del propio artista que se levantó para felicitar a los integrantes de la coral. Durante el encuentro solo tuvo palabras de elogio y satisfacción tanto para el colectivo organizador “Peor para el sol”, como para la iglesia de San Lorenzo de la que se declaró “devoto feligrés”.