'Pleno' al señor Negrillo

El señor Negrillo comienza su escrito atribuyendo al alcalde la utilización del insulto como costumbre en su discurso, haciéndolo además, extensivo a sus concejales. No sé a qué plenos va, o qué plenos ve José Luis, porque yo sí acudo y puedo asegurar que no es el insulto precisamente lo que el alcalde usa presidiendo el Consistorio.
Habla de sarcasmo y de ironía haciendo protagonista al diccionario para afirmar que carece de argumentos y de falta de convivencia en grupo una persona que es profesor de derecho financiero, acostumbrado a impartir clases a grupos de alumnos, que fue secretario general y presidente del PP en los años 1996 y 2000 y que actualmente es presidente provincial, alcalde y también senador. Me parece a mí que con estos cargos, algo habrá tenido que convivir con la gente, algún argumento podrá defender. En definitiva señor Negrillo, irónicamente le diré que se ha “lucido”. En los plenos, las puntadas sin hilo se pasean por todos los bandos, la más alta expresión del ingenio o como usted dice, el sarcasmo, era para Oscar Wilde indicio de inteligencia, y eso es lo que José Enrique Fernández de Moya promulga hacia la oposición para suavizar el desamparo y la ruina que nos ha dejado el anterior gobierno municipal. Si por esto último fuese, el alcalde, no solo tendría que utilizar el sarcasmo y la ironía sino llamar por su nombre al despilfarro, al endeudamiento y a la bancarrota que nos ha dejado al ayuntamiento y a los jiennenses por varias décadas. Continúo diciéndole al señor Negrillo que según sentencia del Tribunal Supremo de 1990 y 1992, los concejales no son autoridad como usted asevera, no por ello hay que negarles el respeto y el tratamiento. Respeto, por cierto, que los concejales del PSOE e IU no hacen gala, interrumpiendo constantemente la palabra y haciendo comentarios que si rallarían en insulto en ocasiones y, al hacerlo sin micro, no se escucha en televisión.
Señor Negrillo, desde ese bando del que escribe, me resulta respetable pero de dudosa credibilidad su reflexión. Quiero terminar diciendo que en esta legislatura, el actual equipo de gobierno carece de oposición. Socialistas y comunistas pasarán estos cuatro años cabizbajos, soportando las dejadeces de su “ex jefa” la señora Peñalver, con caritas coloradas cuando se les habla del tranvía, del aparcamiento del hípico o del parque acuático donde no tienen salida y utilizan otras vías de escape como el abandono de los plenos, el apoyo al SAT o el desamparo que ofrecieron a los trabajadores del centro especial de empleo. Aún así, quiero destacar de la oposición, por su talante, a los señores Colmenero y Rodríguez Cohard. Dos concejales socialistas con formación y educación que, independientemente de su ideología, transmiten sensaciones algo más que políticas, sensaciones humanas.