Plantar cara a Rusia

Soy un profesional dedicado a la exportación de alimentos y me preocupa el veto a la importación de alimentos procedentes de la Unión Europea que acaba de decretar Rusia. A mi entender, creo que tanto el Gobierno de España como las diferentes instancias europeas competentes disponen de herramientas para ser capaces de minimizar el impacto en los profesionales que vivimos de esto y, en general, en la economía de todo el país y de todos los países de la Unión Europea.

    11 ago 2014 / 22:00 H.

    Ese debería ser el primer paso, mitigar el daño de la mejor manera posible. Para eso están los llamados fondos de emergencia agrícola, que existen para circunstancias de este tipo y que tendrían que librarse antes de que el daño sea ya irreparable. No esperar a una caída de los precios en picado; actuar antes de que arda el monte, porque remontar después de haber caído es siempre más complicado. Y, como segundo paso, una vez establecidos esos mecanismos de apoyo a los sectores afectados, habría que actuar desde una esfera más política o diplomática. La UE debe hacer ver al presidente ruso Vladimir Putin que si se decide a hacerle la guerra comercial a Occidente, no le conviene, porque Rusia sería el claro perdedor. Por algo será que el aceite y el vino no entra en la lista negra de los alimentos vetados. Europa puede plantarle cara a Rusia.