Pétreas huellas de la historia en tierra fronteriza

Pepi Galera
Son huellas de un pasado como tierra fronteriza, que dejan entrever los siglos de intensa historia y esplendor. Pero también son presente. Jaén es tierra de castillos. De tesoros artísticos por descubrir. Muchos de ellos suponen, de hecho, la seña de identidad más representativa de muchos municipios jiennenses.

    05 jun 2011 / 10:41 H.

    La estratégica situación del Reino de Jaén, paso obligado desde Castilla hacia Andalucía y de esta hacia Levante, lo convirtió, desde antiguo, en frecuente escenario de campañas militares. Las batallas de Baécula, las Navas de Tolosa o las acciones bélicas promovidas por Fernando III “El Santo” para tomar la capital, propiciaron la necesidad de contar con fortalezas defensivas. Por ello, la provincia concentra en la actualidad uno de los mayores legados históricos de la arquitectura castrense, no sólo española, sino de toda Europa. Tesoros artísticos de incalculable valor. De hecho, la provincia cuenta con cuatrocientos puntos fortificados entre castillos, torreones, murallas o atalayas. Conscientes de esta riqueza, administraciones públicas y propietarios privados llevan años invirtiendo en su conservación para sacar a relucir el esplendor que un día tuvieron y situarlos como una excelente carta de presentación del patrimonio artístico de la provincia. Uno de los frutos más visibles de este esfuerzo es la Ruta de los Castillos y Batallas nacida en 2005.
    La delegación jiennense de “Amigos de los Castillos” se creó en 1999. Desde entonces ha incrementado de manera espectacular, tanto sus socios, como las actividades que realiza.
    Seis claves de las fortificaciones jiennenses

    1Tercera región en cantidad de fortificaciones del mundo. Después de Siria y Palestina, Jaén es la región con más castillos, ya que cuenta con más de cuatrocientos, aunque hay que matizar que, en este concepto, hay que incluir fortalezas, murallas, torres, atalayas y recintos amurallados. Así, sería la primera en Europa y la tercera del mundo en cantidad de construcciones militares. Aunque la gran mayoría no ha soportado el paso del tiempo, sí que existen grandes ejemplos que han sobrevivido y se encuentran en buen estado de conservación. Por solo mencionar algunos, se pueden destacar el Castillo de Baños de la Encina, La Mota de Alcalá la Real, Santa Catalina de Jaén, el Castillo de Canena, el de Alcaudete y el de Lopera.

    2El castillo más antiguo de Europa. Jaén no solo puede presumir de ser la región con más fortificaciones de Europa, sino también de tener el castillo más antiguo, no sólo de la provincia de Jaén, sino de toda Europa, que es el de Baños de la Encina. También llamado Castillo de Burgalimar (deriva de Bury Al-Hamma que significa Castillo de los Baños), es una construcción califal que data del año 968. Rodeado y flanqueado por una robusta y almenada muralla con catorce torres, más una decimoquinta o torre cristiana del Homenaje, el castillo apenas ha sufrido daños ya sean causados por el tiempo o los hombres. Representa, por tanto, un ejemplo perfecto de fortaleza musulmana del siglo X, y constituye el conjunto fortificado mejor preservado de la época del Califato Omeya de Córdoba. Su inestimable valor histórico y artístico es la razón por la que  llegó a ser clasificado como Monumento Nacional en 1931 y Conjunto Histórico-Artístico en 1969.

    3Dos joyas del Renacimiento: Sabiote y Canena. Desde el más antiguo, a los más recientes, que constituyen dos grandes ejemplos de la riqueza renacentista de la provincia. El Castillo de Canena, aunque su construcción comienza a finales del siglo XV , fue Andrés del Vandelvira, el gran arquitecto del Renacimiento, quien transformó el Castillo en un suntuoso palacio. El Castillo de Sabiote, por su parte, es el principal castillo - baluarte de Jaén del siglo XVI y sigue modelos italianos. Sus muros son imponentes y preparados para el fuego de la artillería. Tan recias defensas no permiten intuir la delicadeza de su interior palaciego, donde destaca un patio de dobles galerías. La entrada es una puerta plateresca coronada por el escudo de Cobos Molina y doña María Mendoza.

    4Propiedad privada. Aunque la gran mayoría de los castillos de la provincia están en manos de las administraciones públicas, existen varios ejemplos de construcciones de propiedad privada. En 1538, Francisco de los Cobos  convirtió en el Castillo de Canena en palacio, encargando el proyecto a Vandelvira. Siguió este alcázar en manos de sus descendientes, ya marqueses de Camarasa, y fue declarado Monumento Nacional en 1931. Posteriormente, fue restaurado y conservado con todo cuidado por la familia Vañó, actual propietaria de esta joya del Renacimiento andaluz. También son de propiedad privada el Torreón de Begíjar y el Castillo de las Navas de Tolosa, cuyos restos se encuentran en una finca de ganado bravo. En el caso del primero, es el único vestigio que testifica la presencia de un castillo de significativa relevancia estratégica en la comarca durante la Edad Media. El origen de esta fortaleza está vinculado a la época visigoda. Fue reestructurado por los árabes y, posteriormente, por los cristianos.

    5Buen grado de conservación. Baños, Jaén, Alcaudete, Canena y Lopera son algunos de los mejores ejemplos de conservación de los castillos jiennenses. En muchas ocasiones, gracias a los esfuerzos inversores por la restauración de estos interesantes atractivos turísticos. Pero, además, de estos, que están entre los más conocidos, hay otras construcciones que guardan gran parte de su pasado esplendor. La torre del Infante don Enrique, en el Puerto de Tíscar, en Quesada, fue mandada construir en el siglo XIV y se encuentra  en buen estado de conservación, ya que fue objeto de obras de reconstrucción.  Mención especial merece el Castillo de Segura de la Sierra. En el año 1810, durante la guerra de la Independencia, las tropas francesas incendiaron el castillo. Hasta el siglo XX no se iniciaron las tareas de restauración, que corrieron a cargo de la Dirección General de Arquitectura. Y los resultados fueron positivos, hasta el punto de que fue declarado Monumento Nacional en el año 1965.

    6Fortaleza de la Mota, el más extenso. Orgullo de los alcalaínos, la fortaleza de La Mota ocupa, en la actualidad, más de tres hectáreas, que la convierten en la más extensa de la provincia. La fortaleza, a la que se accede por una monumental puerta en herradura situada entre dos torres unidas por un arco ojival, conserva en su recinto amurallado una gran torre del homenaje en su lado norte, y otras dos de menor importancia.