Nueve países defienden mantener restricciones laborales a rumanos y búlgaros

Nueve Estados miembros de los once que no han abierto totalmente  sus respectivos mercados laborales a rumanos y búlgaros hasta la  fecha han notificado ya a la Comisión Europea su intención de  mantener estas restricciones bien de forma total o parcial en 2012.  Se trata de Reino Unido, Irlanda, Alemania, Francia, Bélgica, Países  Bajos, Austria Malta y Luxemburgo.

    03 ene 2012 / 18:37 H.

    "Nueve Estados miembros han notificado las restricciones bien  totales o parciales que quieren mantener, algo que está siendo  analizado actualmente" por la Comisión, ha confirmado un portavoz del  Ejecutivo comunitario, Ryan Heath, en rueda de prensa. Los Estados miembros sólo podrán mantener las restricciones  laborales este año si justifican "perturbaciones serias" para su  mercado laboral, algo que debían notificar al Ejecutivo comunitario  antes del 31 de diciembre pasado. "Tendremos una respuesta a finales  de esta semana", ha asegurado el portavoz.
    En todo caso, las restricciones laborales se terminarán por ley  como muy tarde el 31 de diciembre de 2013, según virtud de los  Tratados de Adhesión negociados con Sofía y Bucarest. Los otros dos países que venían manteniendo las restricciones  laborales parciales o totales para rumanos y búlgaros, Italia y  República Checa, han levantado dichas restricciones este año, según  ha confirmado el portavoz. "Italia no ha notificado nada y no tenemos indicaciones de que lo  vaya a hacer, lo que implica que automáticamente se levantan las  restricciones", mientras que República Checa ha informado de que  "aplicarán totalmente la legislación sobre libertad de movimiento de  los trabajadores desde el 1 de enero", según Heath. En el caso de España, la Comisión Europea autorizó al anterior  Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a mantener la restricción  laboral para los trabajadores rumanos desde el 28 de julio de 2011  hasta el próximo 31 de diciembre de 2012 como muy tarde tras  constatar  "perturbaciones serias" en el mercado laboral español, una  decisión que el Gobierno de Mariano Rajoy no deberá notificar de  nuevo, ha confirmado el portavoz. Ante la caída del empleo por la crisis en España, el anterior  Gobierno socialista decidió reintroducir el pasado 22 de julio dichas  restricciones laborales para los trabajadores rumanos y exigirles un  permiso de trabajo si vienen a trabajar por cuenta ajena a fin de  "vincular el flujo de entrada" de rumanos "a las necesidades" del  mercado de trabajo nacional y "evitar que estas personas caigan en la  economía sumergida y sean víctimas de abusos y explotación laboral".