24 jun 2014 / 22:00 H.
Después del tropiezo toca levantares y con muchos más bríos. No puede ser de otra manera. El negativo informe del Icomos (Comité Internacional de Monumentos y Sitios) que forzó el pasado mes de mayo la retirada táctica de la candidatura de la Catedral jiennense a Patrimonio de la Humanidad por la Unesco va a ser ahora estudiado, revisado de manera pormenorizada, con el objetivo de poder retomar la carrera hacia esa legítima reivindicación para el mayor templo de la ciudad. Cuando falta apenas una semana para que se cumpla un mes de la dolorosa decisión, el Ayuntamiento quiere impulsar la constitución de un comité de expertos y representantes de todas y cada una de las administraciones y entidades implicadas en esta carrera de fondo. La clave: dar forma a un documento que sirva de trampolín definitivo para que la obra de Vandelvira engrose por fin el listado de monumentos de la Unesco, un preciado título que no se da en absoluto por perdido. El grupo de trabajo debe centrarse en refutar los argumentos que echaron por tierra el anterior expediente, como la falta de uniformidad renacentista y pureza arquitectónica por la dilatada construcción en el tiempo o la falta de un plan de control de seísmos, entre otros. A cual más peregrino. Antes de agosto debe estar constituido el grupo que tomará las riendas de esta importante misión tan ilusionante para Jaén y sus gentes y en esa tarea no hay que escatimar tiempo ni esfuerzo. Sin mirar colores políticos ni otros partidismos mediocres. Tan importante es estar juntos en las duras como en las maduras. Y, ahora toca sumar, con la mirada puesta en echar a andar el 14 de julio próximo.