Noventa minutos que valen un ascenso

Al equipo entrenado por Antonio José García, “Torres”, solo le vale la victoria en el partido de vuelta después de caer derrotado por la mínima (2-1) en el Estadio Paquito Jiménez. El viejo campo de la Avenida Primero de Mayo vuelve a respirar fútbol del bueno. Engalanado como nunca, vivirá una tarde de pasión entre dos equipos del mismo corte defensivo, orden táctico y efectividad en el ataque. Por lo tanto, un duelo de lo más equilibrado, a pesar de la ventaja de un gol con la que parte el combinado de Ángel García Cosín, quien no puede contar con dos de sus mejores hombres, Chato y Bienve, por sanción el primero y por lesión el segundo.
Torres, en cambio, tiene a toda la plantilla a su disposición, por lo que pondrá sobre el cuidado césped de Linarejos al once de gala. Los ojos de los aficionados locales estarán pendientes de la estrella local, el delantero granadino Rafa Payán, máximo realizador del Linares, con 20 goles, y esperanza de una hinchada que sueña con volver a la categoría que por entidad y afición merece, como mínimo, la ciudad. “Llevamos jugando finales varias semanas consecutivas y estamos preparados”, asegura un convencido Torres tras la última sesión de entrenamiento, en la que los jugadores recibieron el cariño de más de un centenar de aficionados.
El Socuéllamos, por su parte, no estará solo. El equipo manchego llegará acompañado de unos 800 hinchas, desplazados en 15 autobuses. Todo un mérito para un equipo al que durante la temporada van a ver a su campo apenas cuatrocientas personas, aunque bien es cierto que el viaje no tiene coste el alguno y el precio de las entradas es mucho menor (10 euros) del que pagaron los linarenses en el pueblo ciudadrealeño (15).  
La mente jugará un papel determinante en la final. “La presión es igual para ambos”, argumenta el preparador linarense, que considera fundamental el apoyo de la afición. “Hemos atraído a la gente y todos juntos esperamos cerrar el ascenso”, argumenta Torres. Ilustres personajes azulillos, como Emilio Vega, Castillo, Jesús Sierra, Romerito, Vázquez, Antonio Sánchez y Cidoncha estarán en la piedra de Linarejos dando su apoyo al equipo en el día más esperado de los últimos años. “Lo único que deseamos es que consigan lo que a nosotros se nos escapó”, asegura el exfutbolista azulillo Diego Castillo. Las cartas están servidas. Decidirá el juego. “Debemos tener paciencia y no perder la cabeza en ningún momento. Podemos ganar el partido tanto en el primer minuto como en el último”, entiende Torres. “No vamos a cambiar nada. No tenemos nada que modificar. La idea es salir a ganar, ser superiores en el juego ante un buen equipo, experto y que juega al límite”, advierte el técnico del Linares. Así pues, todo se decidirá en noventa minutos de vértigo que pueden valer un ascenso.