"No tengo la intención de irme de la Universidad"

A pocos meses de que expire su mandato, el rector de la Universidad de Jaén, asegura que sus objetivos antes de finalizar la legislatura son cerrar la memoria de Medicina, dejar la Fundación Universidad-Empresa y recuperar los terrenos con el nuevo PGOU.


—¿Cómo definiría sus siete años al frente del Rectorado?
—Desde mi elección por primera vez ya sentí la crisis, pero fue a mediados y finales de 2011 cuando lo notamos más. Afortunadamente, esta Universidad tuvo un comportamiento austero entendido como sobriedad. Eso nos permitió no acudir al plan de pago a proveedores, pues teníamos recursos. Esta situación estuvo hasta 2013, cuando hubo un cambio. Ahora somos una institución solvente financieramente. En personal, que es lo que más me duele, empezamos a tener dificultades con las medidas que adoptó el Gobierno en 2012. Tuvimos problemas que aún arrastramos para promocionar e incorporar personal docente y administrativo. Estoy convencido que hay una plantilla de trabajadores fenomenal. Siempre reclamaré el liderazgo social de la UJA. Debemos contribuir a paliar el desempleo con la creación de empresas.

—¿Cree que los universitarios están preparados para ello?
—Sí, lo que pasa es que vivimos en una cultura en la que la gente está más acostumbrada en buscar empleo que en crearlo. El tejido empresarial potente debe ir de la mano de universitarios.

—¿Como están sus relaciones con el Personal Administrativo y de Servicios (PAS)?
—Estamos negociando. Ellos pedían unas medidas y el Gobierno de la UJA lo negocia a través de la gerencia. Deseo que seamos capaces de llegar a un acuerdo.

—Además de las quejas por el nuevo sistema de control del PAS, ¿se podría decir que el problema es la imposibilidad de contratación de personal?
—Claro; ahora estamos atados de pies y manos para contratar personal. Sobre la junta del PAS, cuando establecimos el sistema de control de presencia había que llegar a acuerdos sobre cómo se va a implementar y en eso estamos.

—De cara a las próximas elecciones, ya se conocen los cuatro precandidatos a rector. Este periódico publicó que el proceso comenzará el 4 de febrero, ¿lo confirma?
—Yo como rector no tengo potestad para convocar las elecciones. Es el consejo de Gobierno quien lo hace. En cualquier caso mi intención es que los trámites empiecen cuando terminen los exámenes de enero y así lo propondré al consejo. Pues mi intención es acortar el máximo de tiempo para facilitar al futuro rector el trabajo del curso 2015-16 y lo elabore con tranquilidad.

—¿Hay alguna preferencia ante los cuatro precandidatos?
—Iré al margen y no estaré con nadie, pues es mi obligación como rector. No voy a hacer campaña por nadie, no es mi estilo. Lo que estoy seguro, porque los conozco, es que será una campaña universitaria, de ideas, de cómo contribuir a mejorar la Universidad. Sé que no habrá un mal rollo.
Además, me pongo a su disposición para ofrecerles mi ayuda, datos e información.
—¿Que sensación tiene a pocos meses de agotar su mandato?
—Estoy muy tranquilo porque estoy convencido que los cargos públicos tenemos que tener limitación de mandato. Yo tuve el enorme honor de ser elegido por la comunidad universitaria dos veces. No tengo ninguna nostalgia y seguiré trabajando hasta el final.

—¿Cuál será su próxima etapa?
—Me quedaré en mi Torredelcampo, en mi Jaén. No tengo el más mínimo interés en irme de mi Universidad donde estoy muy contento.

—¿Medicina es una espinita?
—Bueno, la memoria se va a quedar hecha. Se me queda una sensación extraña pero no tanto. Esto ha cambiando tanto, que lo que antes era factible nos dimos cuenta pronto que no lo era. Ahora, lo que no tiene que hacer esta Universidad ni esta ciudad es renunciar a la Facultad de Medicina. Es necesaria pero soy consciente que con las restricciones de personal es imposible, y eso no significa que renunciemos a ello, sino que dejamos las bases para que, en un futuro, se pueda crear. Pero tenemos que estar juntos médicos y universidad.

—¿De qué se siente orgulloso?
—Hemos llevado una política de personal motivante hasta que nos lo impidieron las normas y hemos contribuido a que la sociedad jiennense valore más el papel de la Universidad en el desarrollo territorial. Hay una imagen de la institución seria en los diferentes foros universitarios.

—¿Qué quiere cerrar antes de irse?
—La memoria de Medicina, la Fundación Univerisdad-Empresa y que con la aprobación del PGOU el Ayuntamiento nos dé los 120.000 metros que pertenecen a la UJA.

01 oct 2014 / 10:20 H.