MERY RODRÍGUEZ JIMÉNEZ. "No se conocen las ventajas empresariales de internet"
MARIAM LÓPEZ
Mery es especialista en desarrollo de la cultura emprendedora y uso de las redes sociales como herramienta de trabajo. Eso ya lo dice todo de ella, que no dudó en cruzar el Atlántico a un país con una cultura tan distinta, para avanzar en su formación. Como gran mujer emprendedora que es, y con su alto potencial profesional, se dedica altruistamente a impartir conocimientos sobre internet y las posibilidades de autoempleo mediante las redes sociales. Una mujer tan formada, tan generosa, merece un reconocimiento y una ayuda para continuar dando tantas posibilidades a quienes necesitan esa información tan valiosa para salir del desempleo o promocionarse.
Mery es especialista en desarrollo de la cultura emprendedora y uso de las redes sociales como herramienta de trabajo. Eso ya lo dice todo de ella, que no dudó en cruzar el Atlántico a un país con una cultura tan distinta, para avanzar en su formación. Como gran mujer emprendedora que es, y con su alto potencial profesional, se dedica altruistamente a impartir conocimientos sobre internet y las posibilidades de autoempleo mediante las redes sociales. Una mujer tan formada, tan generosa, merece un reconocimiento y una ayuda para continuar dando tantas posibilidades a quienes necesitan esa información tan valiosa para salir del desempleo o promocionarse.
—Mery, ¿cómo llega a España y por qué se decanta por Jaén?
—Yo vengo de Costa Rica. Allí saqué lo que aquí equivale a la Diplomatura de Empresariales. Mientras seguí mis estudios, trabajé mucho tiempo como administrativo y contable en una tienda de electrodomésticos. Al terminar la carrera, me casé y, al tener mi primer hijo, dejé los estudios aparcados para pasar a poner varios negocios. Finalmente, me voy a trabajar a una cadena de tiendas, donde yo estaba al frente de la supervisión operativa. En 2008, decidí venirme para España por motivos personales, unidos a que, en la parte profesional, yo sentía que tenía muchísima capacidad profesional y podía dar más de mí, pero tenía limitaciones porque mi formación académica era del año 1987 y, aunque en mi currículum tenía mucha experiencia, me faltaba formación complementaria que me dejara aspirar a algo más. Me decidí a venir a España para sacar un Máster en Administración de Empresas, porque no tenía la limitación del idioma. Llegué a Jaén por dos motivos. Primero, porque aquí estaba mi amiga Julia y llegar a un lugar desconocido, pero contando con la mano de una gran amiga, se hacía más fácil y, por otro, porque veníamos de una cultura muy distinta a la de España y Jaén es una ciudad moderna, pero que, al mismo tiempo, cuenta con lo bueno de ser una ciudad pequeña.
—¿Encontró en España esa posibilidad de desarrollarse profesionalmente?
—Yo vine a España con muchas ilusiones, planes, energías y con muchas expectativas, pero llegué en 2008, cuando ya sonaban los rumores de crisis, de que la cosa se está poniendo fea y el trabajo estaban escaseando. Yo estaba muy confiada y con muchas esperanzas y nunca creí que fuera una situación que se alargara tanto y fuera tan difícil, y bueno, me equivoqué. Pero ya no podía echar atrás y volver a Costa Rica porque, al venir, había apostado fuerte por este reto mío, y porque mis hijos ya no querían volver. Tras lo difícil de la situación económica, me surge la oportunidad de impartir un taller sobre “Internet y las Redes Sociales, Herramientas para el Autoempleo”, con la ayuda de mi amiga Carmen Rueda, dueña de “mi red empresarial”, que siempre me ha apoyado. Por lo novedoso de este taller, conseguimos permiso para impartirlo en las instalaciones del Instituto Municipal de Empleo y Formación Empresarial de Jaén (Imefe). Lo imparto de forma gratuita, pero considero que, al menos, me va a servir para promocionarme y dar a conocer mis capacidades, al tiempo que ayudo a personas emprendedoras a crear su propio negocio.
—¿De que trata este Taller sobre Internet y las redes Sociales, Herramientas para el Autoempleo que imparte?
—El taller nace con la idea de que internet y las redes sociales son hoy en día donde deberíamos poner nuestra visión de futuro. A pesar de que estamos ya en el siglo XXI, parece mentira que exista tanto desconocimiento sobre las ventajas que tiene internet y la posibilidad de desarrollarlas, no ya para ocio, que ya es muy conocido, si no en el ámbito profesional y empresarial, tanto para el que ya tiene su propio negocio o empresa, como para el que está desempleado. En primer lugar, internet y las redes sociales sirven como herramienta para el autoempleo y para hacer realidad cualquier proyecto o idea de negocio que se tenga. Por ejemplo, participa en el taller una chica que tiene un proyecto de casas rurales que puede publicitar a través de internet. También hay otra que se dedica a la realización de imperdibles en forma de muñequitos que son unos accesorios para vestir preciosos, pero que, en el ámbito local, no tienen tanta salida como lo pueden tener en el internacional, si se dan a conocer. Hay otras muchas propuestas que pueden tener gran éxito y la herramienta para ello puede ser internet y las redes sociales porque ahora todo va enfocado hacia ese punto.
El taller tiene una primera parte que es la introducción y el conocimiento a internet y las redes sociales. No para saber utilizar un ordenador o abrirse un correo, sino para conocer realmente las ventajas que tiene internet y la utilidad de las redes sociales, como Facebook o Twitter, para darnos a conocer como profesional independiente, como empresa ya establecida, o como pequeño o gran negocio, y no para cotillear o mandar fotos. Grandes empresas mundiales tienen ya presencia en las redes sociales. Es muy efectivo hoy en día darse a conocer en las redes sociales como herramienta de comunicación para atraer a nuestros clientes o futuros clientes.
—¿Cree que puede esta propuesta reducir las tasas de paro?
—Sí, lo que pasa es que hay muchísima desinformación. Evidentemente, yo no voy a bajar las tasas de paro impartiendo este taller, pero sí formo a los interesados en las posibilidades que se les abren para salir de esa situación utilizando las nuevas tecnologías. Por ello, mantengo que todo depende de la formación e información que tengan sobre el asunto para poder llegar a ese punto, porque la posibilidad de abrirse y expandirse es ilimitada, pero, eso sí, no se logra de la noche a la mañana. En un par de años un proyecto bien trabajado puede llegar a estar muy bien posicionado mundialmente. Existe un porcentaje muy alto de personas entre los 35 a 50 años que están accediendo ahora a las redes sociales, porque los jóvenes han nacido dentro de la tecnología, pero la gente de esta edad que no se quiere quedar atrás está acercándose.
—¿Es una propuesta al alcance de cualquier persona?
—Claro que sí. De hecho, ya hay programas adaptados para personas con discapacidad e, incluso, para la tercera edad.
—Existen muchos fraudes por internet, ¿cree que la gente se fía de ofertas de este tipo?
—Es un de los tabús que existen alrededor de internet, pero solo permite el engaño, el desconocimiento, porque con unos conocimientos básicos, se puede saber si se accede a una web segura, si debes pagar o no en ella o dar tus datos. Lo primordial es entender que, por más seguridad que haya en internet, todo puede ser jaqueado.