Merkel y Sarkozy insisten en su exigencia de reformar los Tratados

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés,  Nicolas Sarkozy, han enviado este miércoles una carta al presidente  del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en la que reiteran su  exigencia de reformar los Tratados de la UE para aumentar la  disciplina fiscal en la eurozona como receta para resolver la crisis  de deuda.

    07 dic 2011 / 18:34 H.

    Las peticiones de Merkel y Sarkozy, que los dos mandatarios  hicieron públicas el pasado lunes tras reunirse en París, aparecen ya  recogidas íntegramente en las propuestas que ha elaborado Van Rompuy  para la cumbre del 8 y 9 de diciembre. No obstante, en su misiva, la  canciller y el presidente francés omiten medidas como el refuerzo del  fondo de rescate o la creación de eurobonos, que también ha planteado  el presidente del Consejo Europeo a petición de países como España o  Italia y que Berlín rechaza. Merkel y Sarkozy afirman que el refuerzo de la disciplina fiscal  en la eurozona debe llevarse a cabo "sin demora" porque es  "indispensable para la credibilidad y la confianza en el futuro de la  unión económica y monetaria (UEM)". "La crisis actual ha puesto  claramente en evidencia las lagunas de la arquitectura de la UEM.  Debemos corregir estas lagunas", insisten. "Proponemos que las nuevas reglas y compromisos se incluyan en los  Tratados europeos. En caso contrario, los Estados cuya moneda es el  euro tendrán que avanzar", insisten los dos mandatarios, reiterando  así su amenaza de llegar a un pacto a 17 si algún país de fuera de la  eurozona plantea problemas. París y Berlín reclaman en concreto incluir en los Tratados multas  automáticas para los países que superen el límite de 3% de déficit  previsto en el Pacto de Estabilidad. Y abogan por reforzar los  poderes de la UE para intervenir en los presupuestos de los Estados  miembros con problemas que no sigan sus recomendaciones. Todos los países de la eurozona deberán incluir en sus  Constituciones el principio de estabilidad presupuestaria y el  Tribunal de Justicia de Luxemburgo vigilará que lo hagan  correctamente. Además, se comprometerán a aumentar la convergencia en  materia de mercado de trabajo, regulación financiera, la base del  impuesto de sociedades y las políticas de apoyo al crecimiento. Merkel y Sarkozy piden adelantar a 2012 la entrada en  funcionamiento del fondo de rescate permanente para países  endeudados, que en principio estaba previsto para 2013, y que la toma  de decisiones para activarlo no sea por unanimidad sino por mayoría  del 85%. También reclaman dejar claro que el caso de Grecia -en cuya  deuda en manos privadas se ha aplicado una quita del 50%- es único y  que el resto de países de la eurozona devolverán sus deudas.