Medicinas con su receta
Hace ya unos años, puede ser que casi una década, hubo un problema en algunas farmacias por dispensar medicamentos sin receta en la capital y la drástica medida que se tomó fue que no se vende ni una aspirina si el enfermo no acude con la preceptiva receta. Por mi experiencia, eso se lleva de manera tajante, incluso hasta el absurdo, porque si mañana voy de vacaciones a otra provincia puedo traerme un botiquín lleno sin problema. El control está bien, pero hasta cierto punto. De esta forma, más que ayudar, se perjudica al consumidor.
03 ago 2015 / 08:56 H.