Máxima alerta ante el riesgo de atentados terroristas

El Gobierno ha dado la voz de alerta después de conocer un documento sobre la intención de la cúpula de ETA de perpetrar atentados terroristas “de gran envergadura”.

    30 dic 2009 / 12:14 H.

    El texto incautado a la banda criminal, y calificado de estratégico por los expertos, no concretaba acciones de manera inmediata, pero sí una línea de actuación especialmente dura ante la actual situación de la izquierda abertzale. El objetivo parece ser que se centraba en una puesta en escena ante el conjunto de su base social, a fin de convencer a sus miembros de que existe una planificación para poner en marcha. Es obvio que los terroristas se sirven de la publicidad mediática y la próxima presidencia de turno de España de la Unión Europea coloca al país en un escaparate que la banda de criminales quiere aprovechar en beneficio propio. Desde el Ejecutivo se insiste en los últimos meses en que ETA está especialmente debilitada y el fin primordial de los supuestos ataques previstos es intentar poner fin a las críticas internas en el seno de la banda.
    En cualquier caso, al margen del alcance real del riesgo —que nadie pone en duda— y de la poca o mucha fuerza que en la actualidad puedan tener estos asesinos para llevar a cabo sus cobardes planes, lo que no es de recibo es que se genere un debate político a cuenta del aviso de Rubalcaba en este sentido. La unidad de los demócratas contra el terrorismo no puede tener fisuras bajo ninguna circunstancia, porque en esos enfrentamientos estériles sólo son los asesinos los que salen fortalecidos. Cualquier crítica debería producirse, en todo caso, de manera privada. El ministro Rubalcaba ha defendido la seriedad de su aviso este pasado lunes y a pesar de las críticas de las que ha sido objeto, tanto por partidos políticos como por sindicatos y asociaciones policiales, insiste en que era su deber transmitir esa información.