07 sep 2014 / 08:51 H.
La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Fomento y Vivienda, licitará proyectos para el mantenimiento de los 1.491 kilómetros de carreteras que componen el mapa de la provincia. En conjunto suponen una inversión de 16 millones de euros que tienen como fin, por un lado, la conservación, el refuerzo de firme, el control de la maleza y la mejora de la señalización. Una acción más que necesaria visto el actual estado de algunas vías de gran importancia por el volumen de tráfico que soportan. Por otro lado, también se intervendrá en los propios centros (4 en Jaén) de control y conservación. En ellos trabajan 77 profesionales que se encargan del “cuidado”, día a día, de las infraestructuras y de cualquier contingencia que surja. La partida, por lo tanto, es más que bienvenida aunque, bien es cierto, Jaén requiere de muchos esfuerzos sostenidos en el tiempo para tener un mapa de carreteras de primera. El anuncio de este paquete de inversión coincide en el tiempo con la parada en seco de las obras de la A-32. La futura autovía Andrés de Vandelvira, que comunicará Bailén y Albacete, tiene los tramos en obras en Jaén parados. De nuevo, los recortes de Fomento hacen que cualquier inversión en la provincia se eternice. Pero tampoco la diligencia preside la construcción de la autovía del Olivar, esta en manos de la Junta, tramos en obras que padecen miles de jiennenses que, año tras año, ven cómo los avances son mínimos. Dos intervenciones esenciales para comunicarse mejor dentro de la provincia y con el resto de Andalucía y comunidades cercanas y que, sin embargo, solo reciben migajas del aporte presupuestario. Nuestros representantes políticos deberían ser más reivindicativos por su tierra.