Más allá del reencuentro

 Hablar de partido clave cuando se llevan disputadas solo trece jornadas en el Grupo IV de Segunda B puede resultar algo precipitado, pero lo cierto es que el encuentro de mañana (12 horas) en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo es más importante de lo que parece. Se miden dos equipos implicados en la lucha por eludir el descenso, separados solo por un punto y con la necesidad de ganar lo antes posible para no complicarse aún más la existencia. El vencedor no solo saldrá reforzado en la clasificación, sino también en el aspecto anímico con vistas a próximas citas. Así, desde el punto de vista azulillo, el choque ante el Almería B es de los que están marcados en rojo en el calendario.  

21 nov 2015 / 10:03 H.


En los banquillos, dos entrenadores con una enorme afinidad. Hace diez años eran maestro y alumno. Miguel Rivera, ahora al frente del equipo almeriense, dirigía al Écija Balompié desde la pizarra, y Antonio José García, “Torres”, ahora técnico del Linares, era el jugadores que plasmaba sus ideas sobre el césped. “De él destacaría como saca el máximo rendimiento de todos los jugadores. Es un técnico que conoce muy bien la categoría y en todos los equipos en los que ha estado ha obtenido unos grandes resultados”, resalta Torres, quien estuvo a las órdenes del preparador malagueño en dos etapas, una en el Écija y otra en el Granada 74. Los dos, además, ha experimentado la sensación de ascender con el Linares en el último partido y fuera de casa. Miguel Rivera lo hizo en un inolvidable partido en el Colombino de Huelva, mientras que su “alumno” lo logró en Castalia en otro encuentro histórico.
“Es un equipo al que le tengo mucho cariño y del que guardo grandes recuerdos”, reconoce el entrenador del filial almeriense que destaca de su rival su competitividad y la combinación de experiencia y juventud. “Torres está realizando un magnífico trabajo en el Linares. Tiene un equipo que compite muy bien y al que es muy difícil doblegar”, asegura.
Torres opina más o menos igual del Almería B que en su condición de filial es imprevisible, pero cuenta en sus filas con “jugadores de una enorme calidad” que, en cualquier acción, pueden decidir un partido. “Por eso tenemos que estar concentrados y sólidos en defensa para no dejar espacios. Por banda son extremadamente peligrosos”, advierte el técnico azulillo. Los dos entrenadores tienen bastantes dudas para el choque. Torres, que mañana se podrá sentar en el banquillo tras cumplir la sanción de dos partidos, aún no sabe si podrá contar con Bauti y Rafa Payán, mientras que Rivera está pendiente de la recuperación de Carlos Selfa, Marcos y Yerai.