Martos. Una nueva plataforma reivindica el traslado de la orujera Lamarca
Silvia Ruiz Díaz / Martos
Bajo el nombre “No a la orujera” un grupo de vecinos se une para exigir el traslado inmediato de Ecológica Lamarca. Reivindica un “lugar más idóneo” y se queja de la gran contaminación que sufren los ciudadanos. Según confirman, pidieron “ayuda” al Ayuntamiento para cambiar su ubicación.

Bajo el nombre “No a la orujera” un grupo de vecinos se une para exigir el traslado inmediato de Ecológica Lamarca. Reivindica un “lugar más idóneo” y se queja de la gran contaminación que sufren los ciudadanos. Según confirman, pidieron “ayuda” al Ayuntamiento para cambiar su ubicación.
Cientos de kilos de partículas contaminantes y riesgo de explosión. Un grupo de vecinos, unidos en una nueva plataforma, exige el traslado inmediato de la orujera Ecológica Lamarca, situada en la carretera de Santiago de Calatrava. Aunque reconocen que su ubicación es “legal” e, incluso, recibió algunas distinciones, tienen claro que este tipo de industria sólo perjudica a los ciudadanos. El colectivo pide que la empresa busque un lugar más adecuado para realizar sus labores ya que, a su juicio, el municipio se ve totalmente afectado por la “humareda” que desprenden sus chimeneas. Por ello, “invitan” a dar un paseo por la autovía que une Torredonjimeno y Martos para comprobarlo.
La formación realiza una recogida de firmas y, además, se “apuntó” a las nuevas tecnologías. Mediante la red social “Facebook”, pretende buscar un mayor apoyo. “Vamos a ponernos en pie de guerra hasta conseguir el traslado de las instalaciones a alguna zona más alejada del pueblo”, confirma. De este modo, el grupo asegura que mandó un escrito al Ayuntamiento para solicitarle “ayuda” y conocer la postura de la Corporación Municipal. Según explicó, el área de Medio Ambiente contestó que es “consciente” del perjuicio que “de manera puntual” puede generar la orujera. También expresó que el equipo local no tiene “potestad” para intervenir en este tipo de asuntos y, mucho menos, de “forma arbitraria”.
PERJUICIOS. Por otro lado, el nuevo colectivo advierte de los desperfectos que sufre la zona. Las lluvias registradas durante el invierno, dice, hizo que los vertidos cayeran sobre los cultivos de los alrededores. “Nos consta que en el Ayuntamiento existieron quejas, escritos y denuncias al respecto”, explica. “Nadie está hablando de pérdidas de puestos de trabajo”, asegura. Simplemente, asevera la plataforma, pone sobre la mesa una propuesta de trasladar Ecológica Lamarca. “De ecológica, como dice su nombre, no tiene nada”.
Los vecinos consideran que la humareda, el mal olor y las partículas negras se “posan” sobre las casas, a pesar de que la orujera se sitúa fuera del casco urbano, a escasos kilómetros del centro de Martos. Asimismo, critican que los vertidos de alpechín que se producen suponen un gran peligro para el municipio. Además, se quejan de la “inseguridad” que sufre la propia plantilla de la compañía.
La industria marteña fue el escenario, hace unos años, de una explosión en la que sufrieron quemaduras dos trabajadores, uno en el 29 por ciento de su superficie corporal. En la empresa también se produjo una fuga de hexano —gas utilizado para la extracción de orujo— en el que hubo otros dos heridos.