Los grandes cerebros del Campus de Jaén

Inmaculada Espinilla/Jaén
La Universidad se postula como una cantera de los grandes cerebros de la futura generación._Son los casos de Mariam Pérez y Estefanía Vallejo, que obtuvieron los mejores expedientes de su titulaciones en Jaén, Enfermería y Derecho, respectivamente. Son jóvenes y preparadas, como decía el antiguo anuncio de televisión. Mariam Pérez y Estefanía Vallejo son conscientes de que su paso por la Universidad debe ser algo más que aprobar todas las asignaturas. Saben que es necesario destacar para poder tener más opciones en su futuro profesional. Las dos son inteligentes, cualidad que les valió obtener el premio a los mejores expedientes en sus titulaciones, Mariam, en el ámbito nacional, y Estefanía, en Jaén. Mariam Pérez obtuvo el de Enfermería y, el próximo 2 de junio, recibirá en Madrid, el Premio Nacional Fin de Carrera, que otorga el Ministerio de Educación. Por su parte, Estefanía Vallejo optará, en breve, el quinto Premio Andaluz de Trayectorias Académicas. Además, también fue seleccionada para participar en un seminario sobre el Congreso de los Diputados español, para el que se revisaron los currículos y expedientes de estudiantes de España y la Unión Europea. Tanto Estefanía como Mariam tienen claro que todo lo que estudien durante su juventud contribuirá a que su futuro sea mucho mejor. Por eso, recomiendan a todos los universitarios que aprovechen los años de estudio lo mejor que puedan, aunque, por otro lado, aconsejan que no olviden que son igual de importantes las relaciones humanas. A continuación, dos protagonistas con nombre propio. Mariam Pérez Campos (Tercer premio nacional de Enfermería) Tiene 22 años, es titulada en Enfermería y, en la actualidad, cursa segundo de Fisioterapia. Le encanta el deporte y escuchar música, aunque no olvida sus responsabilidades como estudiante. Las tiene tan presentes que siempre ha destacado en la Universidad. Tanto, que, el próximo 2 de junio, recogerá el tercer Premio Nacional de Fin de Carrera de Educación Universitaria, en la modalidad de Enfermería, correspondiente al curso 2006/07. “Estoy muy contenta. Cuesta demasiado obtener buenas notas en la titulación universitaria y hacerlo tan bien reconforta”, explica Mariam Pérez Campos, que bromea: “Mis padres están muy contentos y orgullosos. Yo creo que les hace más ilusión que a mí”.  La ceremonia se celebrará en el Auditorio Nacional de la Música y todavía no sabe muy bien cuál es el orden de la jornada. “Yo sé que voy a ir con mis padres y que el acto durará una hora aproximadamente. Por mi premio me darán 2.200 euros, aunque supongo que también nos entregarán un diploma”, comenta. Pero antes de este reconocimiento, obtuvo el Premio_Extraordinario de Grado por su expediente y, después, fue la propia Universidad la que se puso en contacto con ella para proponerle que participase en el certamen nacional. “Me dieron la noticia en diciembre. Nos pusimos todos muy contentos”, afirma la joven. Mariam recuerda cómo decidió su futuro profesional. Al acabar la Selectividad, tenía claro que sus futuros estudios se enmarcarían en la Escuela de Ciencias de la Salud. “Siempre me habían gustado_Enfermería y Fisioterapia. Al final, me decidí por la primera porque era más fácil la inserción laboral”, manifiesta la joven. Después, cuando terminó sus estudios, se interesó por la titulación de Fisioterapia, para la que le convalidan algunas asignaturas. “Decidí continuar en la Escuela de Ciencias de la Salud antes de perder el hábito de estudio. Además, en verano, hago sustituciones como enfermera”, detalla. A pesar de que su expediente se compone de notables, sobresalientes y matrículas de honor, Mariam Pérez asegura que tiene tiempo para todo. “Yo no soy de los que se tiran la noche estudiando o se meten madrugones. Yo voy echando ratillos y, cuando se acerca la época de exámenes, aprieto algo más. Mi técnica de estudio no es que sea la mejor, pero a mí me funciona. Consiste en leerme muchas veces los apuntes y, así, se me queda”, concluye Mariam, que no descarta ser también la primera en Fisioterapia. Y, por otro lado, Estefanía Vallejo Susí. (Mejor expediente de la titulación de Derecho). Ser la mejor estudiante de su titulación  le cuesta “tiempo y dedicación”, como mínimo, sin contar el horario de clase, entre tres y cuatro horas diarias. Todo tiene sus frutos. Obtuvo el premio al mejor expediente de su titulación, Derecho, con una nota media de 3,735 sobre los 4 puntos del baremo, es decir, un 9,8 aproximadamente. “He intentado dar lo mejor de mi esfuerzo y  veo que ha servido. Mis padres están orgullosos, sobre todo, el día del reconocimiento”, asegura Estefanía Vallejo Susí, que añade: “Tengo que reconocer que no habría sido posible sin el apoyo de todos los que me han ayudado, como mis padres, mi hermana, profesores y compañeros”. No es la primera vez que sus padres sienten este orgullo, ya que, al acabar sus estudios en el Instituto de Enseñanza Secundaria Santo Reino de Torredonjimeno, también obtuvo un reconocimiento por ser uno de los mejores expedientes. Es más, después se presentó al Premio Extraordinario de Bachillerato por Andalucía y tuvo la máxima calificación por Jaén. Pero Estefanía Vallejo Susí aspira a mucho más. En breve solicitará otras becas y galardones, como el quinto Premio Andaluz de Trayectorias Académicas. “He tenido que sacrificar mi tiempo libre y el ocio”, explica la joven, que detalla que acabó la licenciatura en julio del curso pasado. En cuanto a su futuro profesional, ya lo tiene decidido. En la actualidad, prepara las oposiciones de registrador de la propiedad. “Dudaba entre esto y notaría, pero me gusta el trabajo que desempeñan”, señala. Sabe que se trata de una prueba dura, pero no le asusta porque está acostumbrada a estudiar “mucho tiempo” y “tiene cogido” el hábito. El temario de su oposición se compone de cuatrocientos capítulos y ya ha superado el primer cuarto. “Se dividen en varios exámenes, así que estoy tranquila._Me presentaré a la próxima convocatoria”, dice Estefanía Vallejo. “No me arrepiento del tiempo que he dedicado al estudio porque la recompensa merece la pena. La formación es lo más importante, te ayuda a desenvolverte en la vida. El conocimiento tienen que ser alegría, no una losa en el camino”, explica Estefanía. En este sentido, apunta que, aunque se vio obligada a dedicar muchas horas al estudio, ha tenido una vida normal. “Soy una chica abierta y no me faltan los amigos. Cuando me apetece salir, lo hago. Todo es cuestión de organizarse bien._Además, los primeros años en la Universidad son los más duros, hasta que  le pillas el truco”, concluye la joven. Ahora, tiene claro que los próximos años estarán dedicados a obtener una  buena nota en las oposiciones.

    26 may 2009 / 10:52 H.