Los españoles toman menos aceite de oliva

Los españoles consumen menos aceite de oliva. El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino certifica una caída en la compra de aceite y, también, en los beneficios que genera el negocio porque los ingresos no se quedan al margen. En cambio, parece que la cuota de mercado se mantiene.

    04 oct 2011 / 09:19 H.

    La bajada en el consumo de aceite es casi una anécdota gracias a los barcos y camiones cisterna que parten cargados rumbo a otros países. La excelente evolución de las exportaciones —que va camino de un nuevo récord histórico— salvan al sector de un problema grave, como sería que no se pudiera vender la cosecha que se produce cada campaña. No obstante, el Gobierno de España tiene listo el “Panel de hogares”, que revela que los españoles compran menos aceite y, consecuentemente, que los beneficios se reducen. Además, la pérdida de ingresos llega por dos vías, como son la reducción del volumen que se compra y, también, los bajos precios a los que se comercializa.
    Los españoles compran un 2,2% de menos aceite que hace un año. Parece que no se pierde mercado —no hay otro producto que ocupe su lugar—, sino que, simplemente, se trata de una cuestión de “recorte” o, dicho de otro modo, de aprovecharlo más que antes —esperar un poco más para limpiar la freidora, por ejemplo—. Además, el “enemigo” histórico del zumo de las aceitunas —el aceite de girasol— vive un momento complicado porque es el que pierde más consumidores. Mucho tiene que ver el auge del 13,6% en su precio y el abaratamiento —unido a la buena fama— del “oro líquido”.
    Los españoles compran, sobre todo, lo que se vende como aceite de oliva —mezcla de vírgenes y refinados—. Representa el 42%. Los vírgenes y extras tienen un público mucho más selecto. Además, cada persona toma 13,5 litros —consumo per cápita—, lo que supone una bajada del 3,4% respecto al año anterior. Si la “aceite-dependencia” se mira en términos económicos, cada español se gasta 27,88 euros al año —se trata de una media, que incluye al que destina mucho más dinero y al que no gasta nada en esta grasa—. No obstante, existe una reducción del 2,5% del gasto en función al año pasado.
    entre las familias. El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino revela que el aceite está presente en el 38% de los hogares españoles —en casi cuatro de cada diez—. Aquí no existe variación respecto al año pasado, lo que refuerza la idea de que se ahorra aceite, pero no se sustituye —menos consumo, pero se mantiene el mercado—.
    Resulta curioso que los “hogares retirados” son los que más confían en el zumo de la aceituna. El informe se refiere con este término a familias jubiladas o que ya no tienen una vida laboral tan activa, por lo que adoptan con más fuerza los patrones de la alimentación saludable. Toman hasta 22,3 litros por persona, lo que representa 8,8 más que la media española, que está en 13,15. Por el contrario, las familias con niños pequeños son menos “aficionadas” al aceite de oliva. Toman una media de 7,8 litros por persona cada año, lo que representa 5,7 menos que la media española. Los riojanos son los que más grasa de aceituna compran. En cambio, los manchegos y los valencianos están entre los que menos. La venta se centra en los establecimientos que hacen las grandes ofertas. De hecho, nueve de cada diez litros de aceite se adquieren en hipermercados, supermercados, tiendas de alimentación o comercios de grandes descuentos.
    Enrique Alonso/Jaén